Un joven de 24 años ha desatado la indignación en el Bronx, Nueva York, tras matar a su hijo, Aiden, de cinco semanas al estampar la cabeza del bebé contra el suelo porque "no paraba de llorar".

Christian Rodríguez tenía antecedentes penales por maltratar a sus cuatro hijos, de hecho uno de ellos estaba bajo custodia de los servicios sociales y ya no vivía con él cuando ocurrió el asesinato de Aiden.

El pequeño fue trasladado al hospital donde los sanitarios certificaron su muerte, que sufría una fractura en el cráneo, hemorragias y hematomas. Las graves lesiones que presentaba el cuerpo del recién nacido alertaron a la Policía, que detuvo a su padre.

Según la versión del padre, el pequeño se golpeó con la cabeza en una puerta mientras el padre lo sostenía con la mano derecha y llevaba el carrito con la izquierda y que por eso comenzó a llorar. Ante la imposibilidad de calmarlo, según Christian Rodríguez, "me enfadé y tiré a Aiden de cara al suelo".