La Sala Segunda del Tribunal Supremo (TS) ha confirmado hoy la condena de cuatro meses de prisión y el pago de una indemnización de 80.000 euros impuesta al hombre que en 2014 golpeó e insultó a una panadera de Corcubión embarazada que acabó perdiendo a su feto.

El TS, informa el fallo remitido a la prensa, ha desestimado el recurso presentado por el acusado contra la sentencia de la Audiencia Provincial de A Coruña, que consideró probado que la causa del aborto que sufrió la víctima fue el estrés provocado por la agresión y el miedo a perder al feto.

El agresor fue condenado a cuatro meses de prisión por un delito de aborto por imprudencia grave y debe pagar una indemnización por daños físicos y morales de 80.000 euros a la víctima.

Los hechos se remontan a las seis y media de la madrugada del 9 de noviembre de 2014, cuando el agresor volvía de una noche celebración junto a otras personas y se dirigió a una panadería, en la que llamó al timbre, golpeó la reja del portal y pidió a gritos que le dieran un bocadillo.

Minutos más tarde, una empleada de la panadería salió de su interior con la intención de dirigirse a la furgoneta con la que hacía el reparto del pan, pero fue interceptada por el condenado, que se situó frente a ella, le dio un cabezazo, un golpe en la cara y diversos empujones".

La víctima le pidió al acusado que no la golpeara, ya que estaba embarazada y, si bien el agresor no golpeó el vientre de la perjudicada, tampoco detuvo su ataque.

El condenado también habría amenazado a la víctima gritándole que "te voy a hacer parir", "sudaca de mierda" o "te voy a mandar a tu país en una caja".

Veinte días después de la agresión y tras varios ingresos, fue al hospital, donde descubrieron una rotura temprana de membranas, produciéndose acto seguido el parto de un feto muerto.

La Audiencia Provincial de A Coruña consideró probado entonces que el estrés había sido la causa del aborto de la víctima, quien más tarde acudiría al juicio en tratamiento psicológico y psiquiátrico por estrés postraumático.