La Policía Nacional ha detenido en Granada al parricida de Elche, al que buscaban desde hace más de tres semanas cuando su hermana, e hija de la fallecida, encontró el cuerpo de la mujer de 69 años bajo la cama. La detención se produjo este fin de semana, según ha podido confirmar este diario, en la capital andaluza, tras focalizar la búsqueda en las provincias limítrofes, ya que, por su mermada capacidad económica, no podía huir mucho más lejos. De hecho, una de las hipótesis que se barajan es que el motivo que desencadenó en el fatal crimen fuera una discusión entre madre e hijo, al pedirle dinero para estupefacientes, ya que era adicto a las drogas.

El arrestado, de 39 años, ha pasado esta mañana a disposición judicial, y se encuentra en estos momentos en los calabozos de la Ciudad de la Justicia de Elche, a la espera de que se le tome declaración, aunque podría posponerse a mañana.

La investigación comenzó en la noche del 30 de mayo, cuando la hija de la fallecida, que había denunciado su separación, encontró el cuerpo al legar a su casa bajo la cama. Fue ella la que dio el aviso a la Policía, y de inmediato el hijo de la víctima pasó a ser el principal sospechoso. Su búsqueda ha traído de cabeza a la Policía Nacional desde entonces, hasta que este fin de semana se ha producido su detención.

En un primer momento, se focalizó la búsqueda entre Elche y Alicante, la ruta habitual del sospechoso para la adquisición de estupefacientes. Rápidamente se extendió su búsqueda por otras zonas cercanas, incluso por todo el país, en estaciones de tren, autobuses y aeropuertos, para evitar una huida. Precisamente esa condición de drogodependiente hace pensar que puede esconderse no muy lejos de la ciudad, y las labores de búsqueda se están intensificando, pues cada día que pasa juega en contra de los agentes.

La causa, que ha asumido el Juzgado de Instrucción número 3 de Elche, permanece bajo secreto de sumario, y probablemente no se levantará hasta que sea detenido el principal y único sospecho hasta el momento. La distribución de la fotografía se realizó entre todos los Cuerpos y Fuerzas de Seguridad, con el fin de lograr capturarlo lo antes posible. La causa del asesinato aún es una incógnita, aunque una de las hipótesis que se baraja es que madre e hijo discutieran por temas relacionados con los estupefacientes. Solo la detención y testimonio del sospechoso podrá arrojar luz sobre el asesinato, el segundo parricidio en dos años, tras el del Paseo de Germanías en 2016.