Agentes del Servicio de Protección de la Naturaleza (Seprona) de la Guardia Civil han detenido a un hombre que presuntamente se introducía por las noches en una finca de Alcúdia, en Mallorca, para mantener relaciones sexuales con una yegua y una potra. Los propietarios de los animales habían detectado lesiones y marcas que les habían despertado sospechas, por lo que instalaron unas cámaras de seguridad en el establo y le grabaron mientras realizaba las prácticas de zoofilia. Tras ser interrogado por los agentes, el hombre quedó en libertad y será citado para declarar en el juzgado de instrucción número 2 de Inca, que recibió este lunes el atestado policial por un presunto delito de maltrato animal.

Según el informe enviado al juzgado, la Guardia Civil recibió hace aproximadamente un mes una denuncia por parte de los propietarios de una finca agrícola y ganadera del término municipal de Alcúdia, que habían descubierto que había un individuo que se colaba por las noches en el establo, donde tenían una yegua y una potra de pocos años, y realizaba prácticas sexuales con los animales.

Según los denunciantes, hacía un tiempo que habían detectado detalles extraños en los animales. Tras someterles a una inspección y a un examen por parte de un veterinario, descubrieron que tenían marcas y lesiones en los genitales que les hicieron sospechar de que había alguien que les estaba maltratando.

Cámaras en el establo

Estas prácticas se repitieron varias veces a lo largo del tiempo, por lo que los propietarios finalmente decidieron colocar unas cámaras de seguridad escondidas en el establo.

La sorpresa surgió al visionar las grabaciones, cuando descubrieron que una persona se introducía subrepticiamente por las noches en el establo para mantener relaciones sexuales zoofílicas con la yegua y la potra.

Las grabaciones recogen las prácticas sexuales, pero a partir de las imágenes resultaba difícil identificar al individuo.

Este material, junto a la denuncia, fue enviado al Seprona de la Guardia Civil, que fue el encargado de abrir una investigación, al tratarse de un posible caso de maltrato animal. Parece ser que las lesiones que sufrían los dos animales no se debían solo a los actos sexuales que el hombre mantenía con ellos, sino también a la introducción de objetos.

Los agentes realizaron una investigación que permitió finalmente identificar al presunto intruso, un hombre de unos cincuenta años residente en Alcúdia.

El detenido es un hombre con familia y con un empleo estable, sin ninguna clase de antecedentes por sucesos similares.

El presunto responsable de las agresiones a las yeguas fue detenido el pasado viernes. En las dependencias de la Guardia Civil se negó a declarar, y posteriormente fue puesto en libertad, a la espera de ser citado por el juzgado que instruye el caso.

El Seprona confeccionó el atestado y lo entregó este lunes al juzgado de instrucción número 2 de Inca, que continuará con el procedimiento contra el detenido por un supuesto delito de maltrato animal.

Este delito está contemplado en el artículo 337 del Código Penal. Contempla penas de entre tres meses y un día a un año de prisión e inhabilitación especial de un año y un día a tres años para el ejercicio de profesión que tenga relación con los animales y para la tenencia de animales, al que "por cualquier medio o procedimiento maltrate injustificadamente, causándole lesiones que menoscaben gravemente su salud o sometiéndole a explotación sexual".