El descarrilamiento de un tren en O Porriño -el convoy que enlaza Vigo y Oporto- se ha saldado con una veintena de heridos de diversa consideración, muchos de ellos en estado de shock. A pie de estación, un auténtico frenesí de profesionales sanitarios y de emergencias que han montado en la cafetería de la estación de O Porriño una enfermería improvisada.

Durante una hora, los sanitarios del 061 -alrededor de una decena de ambulancias están aparcadas a las puertas- trataron de calmar y dar apoyo a los viajeros con síntomas evidentes de ansiedad. Personas mayores, veinteañeros y algún extranjero, entre ellos.

La zona está tomada por las fuerzas de seguridad y los equipos de emergencias: bomberos, Policía local, Protección Civil, técnicos de ADIF y un helicóptero del 061. En los alrededores, cientos de personas, vecinos de la villa, se han acercado ante las dimensiones de la tragedia.