Un hombre ha sido detenido en Weihai, China, tras publicar un vídeo en las redes sociales en el que se le veía atando a su perro al parachoques de su vehículo y arrastrándolo por las calles de la ciudad.

Varias personas consiguieron detenerle en el momento en el que grababa el vídeo pero el perro presentaba lesiones en las patas que minutos después acabarían con su vida.

El hombre, identificado como Qi, según recoge el South China Morning Post, colgó el vídeo en las redes sociales orgulloso.

Tras ver las imágenes, varios hackers lograron su dirección rastreando la actividad de Qi en internet y se convocó una manifestación en su casa en la que destrozaron su coche y algunas de sus pertenencias. El descontrol fue tal, que el dueño del perro tuvo que llamar a la policía antidisturbios.

Los hechos acabaron con la detención de cinco personas, entre ellas él.

El hombre se defiende afirmando que el perro le había mordido a él y a otras personas en varias ocasiones, por lo que ya no quería acercarse al animal y decidió atarlo al coche.

Al animal lo había recogido de la calle hace dos años.