­Dos personas resultaron ayer con heridas graves al estrellarse el ultraligero en el que viajaban contra unos palés cargados de ordenadores de reciclaje, que se encontraban apilados dentro del recinto del Centro de Residuos Urbanos de San Javier.

Los hechos se produjeron sobre las 12.55 horas, minutos después de que despegara el ultraligero desde el campo de vuelo de Los Garranchos, ubicado en la pedanía agrícola de El Mirador, a 500 metros del Centro de Residuos Urbanos.

Según fuentes de la Policía Local, el ´aterrizaje´ sobre los ordenadores salvó la vida de sus ocupantes, ya que de haberse producido el impacto contra el suelo, las lesiones podrían haber sido fatales para los accidentados. Los heridos en ningún momento perdieron la consciencia mientras eran excarcelados de su interior por los bomberos del Consorcio de Extinción de Incendios y Salvamento de Los Alcázares.

Uno de los viajeros, Salvador Arce de 49 años, es instructor de vuelo, y fue trasladado en una Unidad Médica Especializada del Servicio Murciano de Salud al Hospital Virgen de la Arrixaca, con fractura abierta en ambas piernas y un corte en el cuello. El otro, Jorge Ruiz de 22 años, fue trasladado en una ambulancia hasta el Hospital de los Arcos de Santiago de la Ribera, con fractura abierta en las dos piernas.

¿Qué es un ultraligero?

Los ultraligeros son pequeños aviones deportivos que están entre el vuelo libre (ala delta) y el vuelo con motor (avionetas). Son de poco peso y escaso consumo, provistos de motor que permite despegar desde el suelo y con una buena autonomía.

La aviación ultraligera viene siendo exactamente lo mismo que la tradicional, con la diferencia de que ésta intenta simplificar todo lo que puede, empezando por el peso de la aeronave y el aprendizaje.

Generalmente los vuelos se realizan a una altura de 150 a 200 metros, aunque la legislación te permite alcanzar los 300. El ultraligero lleva un paracaídas incorporado que se abre en 0,4 segundos y tiene efectividad a partir de los 50 metros de altura.