Sólo quería lavarse las manos para comer y eso le costó la vida. Hamid, un inmigrante marroquí de 35 años, murió ayer ahogado en el canal del trasvase a su paso por la localidad de San Cayetano, en Torre Pacheco. El joven pasó toda la mañana junto al resto de sus compañeros en una finca de la zona en la que estaban recolectando limones para una empresa agrícola.

A la una de la tarde, uno de sus compañeros le dijo que parara para comer y él se acercó al canal situado junto a su lugar de trabajo para asearse antes de empezar. Al parecer, lo hizo sólo y, debido a la pendiente del canal, resbaló y cayó al agua. «No sabemos si sabía nadar, ni qué le ha podido pasar, pero lo hemos encontrado sumergido», explicó desolado el joven que lo halló y que, al poco tiempo lo echó de menos. «No entendía qué le había pasado y empecé a buscarlo. Descubrí sus tijeras a la orilla del canal y me asomé al agua. Allí estaba, sumergido y atrapado entre unas cañas», relató.

Un portavoz de la empresa comentó que Hamid llevaba unos cuatro meses trabajando con ellos y que no tenía familia en la zona. Residía en San Pedro del Pinatar, conde buscarán a personas que lo conozcan con el fin de repatriar a Marruecos su cuerpo. «Sus compañeros se han mostrado a renunciar a parte de su nómina para pagar los seis mil euros que puede costar su repatriación», indicó la misma fuente.

Los bomberos del Consorcio de Extinción de Incendios sacaron el cadáver del agua tras obtener la autorización del forense y en presencia de varios agentes de la Guardia Civil, cuyas investigaciones previas apuntan a que sólo se trata de un accidente.