En rueda de prensa, Cortés ha manifestado tener la certeza de que "hay muchos datos importantes que la gente tiene y que les da miedo soltarlos; sólo les pido que vayan a la Policía a comunicarlos, que nadie los va a detener, simplemente le tomarán declaración".

Esta información, ha comentado, serviría para poner luz a ciertos puntos de la investigación como es el caso de las dos niñas que presuntamente fueron vistas por una vecina con Mari Luz el día de su desaparición y "no sabemos quién son".

Juan José ha ido más allá y les ha pedido que en caso de no superar ese miedo, que "acudan a mi casa a contarlo porque cualquiera de esos datos nos pueden conducir al hilo para encontrar a mi hija", al tiempo que ha indicado que "el callarse algo hoy puede golpear mañana las conciencia y arrepentirse de lo que no se ha hecho".

Según ha explicado esto no significa que vean como sospechosos a todos los que pueden ocultar algo, sino que con su colaboración "podríamos resolver el caso antes".

Con respecto al optimismo mostrado ayer por la pronta aparición de su hija, que contrasta con las informaciones dadas por el Delegado del Gobierno en Andalucía, Juan José López Garzón, que asegura esta mañana que "no había novedades relevantes", el padre de Mari Luz ha manifestado que se debía a que "se van descartando datos que me tenían preocupado".

Además, ha dejado claro que lo suyo es "una corazonada de padre, el mismo sentir que me ha hecho mantener la mente fría durante ese tiempo", y ha señalado que él, al margen de la investigación, acumula una serie de sentimientos y datos, que también contrasta, "que me hacen albergar la esperanza de que mi hija está viva y que quien la tiene por la intensidad que está cobrando el caso está muy forzado a soltarla".

Para él, la hipótesis del secuestro es la que le hace albergar más esperanzas, más aún si después de todos estos días de rastreo no se ha encontrado nada, "creo que está en algún sitio con alguien", ha reiterado aunque ha resaltado que no ha recibido ninguna llamada que apoye esa hipótesis.

"Me voy a desgastar como una zapatilla intentando encontrar a mi hija, tengo derecho", ha dicho, al tiempo que ha animado a la gente a seguir colaborando tanto en los rastreos como económicamente en la cuenta de Mari Luz, abierta en el BBVA, en la que ya se han ingresado en torno a 6.000 euros.