El hombre desapareció hace tres semanas y, entre tanto, la mujer se ha dado a la fuga, informaron hoy fuentes de la Fiscalía de esa ciudad alemana.

El principal indicio del crimen, así como de la forma en que se deshizo del cadáver, está en una declaración de la sospechosa a sus hijos, ambos adultos, interpretable como una confesión de los hechos.

Ante las insistentes preguntas de éstos acerca del paradero de su padre, la mujer respondió: "No vais a encontrarlo, lo he echado al retrete".

Testigos de la familia han declarado que, efectivamente, la noche en que supuestamente desapareció el marido oyeron insistentemente el ruido de la cisterna del lavabo en el hogar del matrimonio.

Al parecer, las disputas eran frecuentes entre la pareja, ambos musulmanes, pero no se habían decidido a separarse.

Según se ha sabido ahora, la mujer había intentado repetidamente envenenarlo con substancias mezcladas en su comida y hasta le había golpeado con un martillo, sin que el hombre hubiera presentado nunca denuncia contra ella.

La Policía inició la búsqueda tras la denuncia de los hijos y se encontraron que la casa estaba primorosamente limpia, lo que no evitó que los equipos forenses diesen, gracias a sus aparatos de detección, con rastros de sangre en el comedor, el suelo y el baño.

Una de las paredes estaba recién pintada, en un supuesto intento de la mujer por hacer desaparecer todas las pistas, y en la cocina faltaban algunos cuchillos.

Perros sabuesos rastrearon este lunes la casa, contenedor de basura incluido, pero hasta ahora no han dado con restos del cuerpo.

Los servicios de recogida de basuras ya habían vaciado el contenedor días antes y probablemente sus restos que fueron lanzados por el váter terminaron en la incineradora, por lo que la policía busca ahora rastros de la víctima en los desagües y el alcantarillado.

Se sospecha que la mujer se encuentra en Macedonia, su país de origen, a donde se marchó el día siguiente de Navidad y desde donde habría intentado repetidamente extraer dinero de la cuenta bancaria de su marido.

La fiscalía de Düsseldorf ha emitido una orden de búsqueda internacional.