Violencia machista

El aborto, la prostitución y los vientres de alquiler también dividen al Parlamento Europeo

La futura directiva sobre violencia contra las mujeres descarta considerar delitos la denegación de la interrupción del embarazo, la prostitución o la gestación subrogada

Banderas de la Unión Europea en la sede de la Eurocámara en Bruselas.

Banderas de la Unión Europea en la sede de la Eurocámara en Bruselas.

Violeta Molina Gallardo

Denegar el acceso al aborto, la prostitución y los vientres de alquiler no serán considerados violencia contra las mujeres en la Unión Europea. La división política e ideológica en torno a temas ha impedido que el Parlamento Europeo incluya estas tres realidades en la futura directiva sobre la lucha contra la violencia contra las mujeres y la violencia doméstica.

Esta directiva, cuyo contenido propuso la Comisión Europea y ahora ultima el Parlamento Europeo, será la primera herramienta legislativa de la UE para combatir la violencia de género con reglas mínimas comunes en todos los países miembros. La violación basada en la falta de consentimiento, la mutilación genital femenina y la ciberviolencia serán considerados formas de violencia contra las mujeres y todos los países tendrán que legislar para castigarlos.

1.800 enmiendas

Tras la presentación de más de 1.800 enmiendas de los distintos grupos políticos, El Parlamento ha acordado introducir también los delitos de acoso sexual en el trabajo y en el ámbito laboral, la esterilización forzosa y el matrimonio forzoso. Sin embargo, no ha habido acuerdo para considerar violencia de género la prostitución, los vientres de alquiler y la denegación del derecho al aborto y, por extensión, el embarazo forzado.

Hay división ideológica y de planteamientos sobre estos temas no sólo entre los distintos grupos políticos, sino también dentro de una misma formación. Ante la voluntad del Parlamento de sacar adelante la directiva, que tendrá que ser negociada en trílogos con el Consejo de Europa durante la Presidencia Española de la UE, se ha optado por dejar fuera estos delitos en pro del acuerdo.

Así lo han explicado este lunes las eurodiputadas Rosa Estarás (PP), Lina Gálvez (PSOE) y Margarita de la Pisa (Vox), que se han desplazado a Madrid para informar de la marcha de las negociaciones sobre la directiva.

"No era inteligente ponerlo porque en el Consejo quedaría paralizado y queremos que salga. Vamos a ser prácticos para poderlo sacar", ha concedido Estarás.

Gálvez ha contado que diversos grupos han considerado que la introducción de la prostitución, incluso del proxenetismo, sería una "línea roja" para apoyar la directiva y por eso se ha dejado fuera. "Existe mucha división, no hay acuerdo", ha reconocido la socialista. En esto, el Parlamento Europeo se parece bastante al español, que ha vivido en esta legislatura fuertes tensiones en torno a la regulación o prohibición de la prostitución.

"Cuando hay posturas irreconciliables que pueden poner en peligro el resto de la directiva, se da un paso atrás en aras del consenso", ha añadido la socialista.

Y es que Europa se juega mucho con esta directiva, como ha recordado Estarás, ya que va a ser "el primer instrumento legislativo que marca unas normas mínimas en todos los estados miembros para abordar de manera eficaz la prevención, protección y ayuda a las víctimas" de la violencia de género. No existe ninguna legislación específica de violencia sobre las mujeres y era una "necesidad" con los "datos alarmantes" que existen, ha dicho la eurodiputada del PP.

Además de considerar delitos de violencia contra las mujeres las conductas mencionadas y establecer tanto unos marcos mínimos de penas máximas, agravantes y plazos de prescripción, la directiva ahonda en la recogida de datos sobre violencias machistas, la prevención, la protección y la reparación de las víctimas.

La difícil negociación con el Consejo

Los próximos 26 y 27 de junio, la Comisión de Derechos de las Mujeres e Igualdad de Género votarán la propuesta, que no está claro que suba a Pleno. Estarás ha adelantado que previsiblemente se elevará directamente a trílogos para la negociación con el Consejo de Europa.

Las eurodiputadas han asegurado que el Parlamento está muy volcado en sacar adelante la directiva, con mayores acuerdos que disensos, si bien han añadido que el escollo se va a encontrar en el Consejo, pues hay países (conservadores) que no ven con buenos ojos algunas de las propuestas y que ni siquiera han ratificado el Convenio de Estambul. "Se esperan discrepancias en el consejo", ha adelantado Estarás.

Será la Presidencia Española quien lleve la batuta en esas negociaciones, una presidencia en la que se van a celebrar elecciones generales. Para Estarás, eso restará liderazgo y cree que sólo cuando el futuro Gobierno esté asentado la negociación cogerá fuerza. Algo que no comparte la socialista Gálvez, que ha asegurado que todos los trabajos seguirán en marcha tal y como estaban previstos. "Todo sigue adelante", ha dicho.

Ahora bien, esperan que la negociación con el Consejo conlleve que la directiva se suavice, quede descafeinada en ciertos aspectos, previsiblemente la parte penal que tiene que ver con la violación y la esterilización forzosa. "Será difícil la homogeneización de penas", ha advertido Gálvez.

Violencia digital

Más optimistas se muestran con la parte dedicada a la violencia digital contra las mujeres, que además supone un importante paso adelante, puesto que esta ciberviolencia no forma parte del Convenio de Estambul y está todo por hacer en esta material.

La directiva considerará delitos la difusión y producción no consentida de material íntimo sin consentimiento, el ciberacecho, el ciberacoso y la incitación al odio o a la violencia cibernéticos.

Se trata de delitos que se perpetran a través de internet y, por tanto, su naturaleza transfronteriza puede ser acusada. La normativa establece marcos mínimos de penas máximas y de prescripción, que no podrán reducir los países miembros.

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El 016 atiende a las víctimas de todas las violencias contra las mujeres. Es un teléfono gratuito y confidencial que presta servicio en 53 idiomas y no deja rastro en la factura. También se ofrece información a través del correo electrónico 016-online@igualdad.gob.es y asesoramiento y atención psicosocial mediante el número de Whatsapp 600 000 016. Además, los menores pueden dirigirse al teléfono de ANAR 900202010.

Las víctimas de maltrato sordas, con discapacidad auditiva, ciegas o sordociegas pueden llamar al 016 con 900 116 016, SVisual, ALBA, Telesor, ATENPRO y la app PorMí. Todos los recursos contra la violencia de género.