Unos 67.300 sanitarios que ahora mismo encadenan un contrato tras otro darán un paso hacia la estabilidad laboral de la mano de una iniciativa legal aprobada este martes por el Consejo de Ministros y que los convertirá en personal fijo. El real decreto se enmarca en el plan para reducir la temporalidad en el empleo público (en educación también se está llevando a cabo) hasta situarla por debajo del 8%. Cuando el real decreto ley entre en vigor, ningún profesional del Sistema Nacional de Salud podrá estar más de tres años trabajando como interino y deberá ser reconocido y remunerado laboralmente como funcionario. La titular de Sanidad, Carolina Darias, ha explicado que antes del 31 de diciembre de este año todas las plazas serán convocadas y ocupadas por esos más de 60.000 sanitarios. "La temporalidad no podrá volver a tener cotas tan elevadas", ha destacado la ministra tras dejar claro que los profesionales son "la columna vertebral" de la sanidad pública.

Al estar las competencias sanitarias transferidas, serán las comunidades autónomas las que convertirán el decreto -una reforma de una ley de 2003- en una realidad en hospitales y ambulatorios. El real decreto ley entrará en vigor este jueves, un día después de su publicación en el Boletín Oficial del Estado (BOE). Dado lo complejo del sistema, el Ejecutivo ha otorgado a las diferentes consejerías un plazo adicional de cuatro meses para "realizar los cambios oportunos en los sistemas de información de recursos humanos”. Respecto a los posibles choques con las autonomías, Darias ha dejado claro que el texto "respeta tanto la Constitución como los marcos competenciales".

Sin embargo, las autonomías no aplauden con fervor la iniciativa del Gobierno. Tras conocerla por los medios de comunicación, el 'conseller' de Salut, Josep Maria Argimon, la ha calificado de “un anuncio más” de Pedro Sánchez. El 'conseller' ha insistido en el problema de "infrafinanciación crónica" que sufre la sanidad. "Nos gustaría que algún día, para salud, anunciara lo mismo que el último incremento del presupuesto militar", ha reivindicado en alusión al anuncio de aumentar el gasto en Defensa un 2%. Tampoco ha tenido buenas palabras para el Ejecutivo el consejero madrileño. Enrique Ruiz Escudero ha censurado la "apropiación indebida" del presidente del Gobierno, porque, ha recordado, se trata de un mandato de Europa. “Somos las comunidades autónomas las que hemos negociado”, ha asegurado. 

Tres años

"El cómputo total de todos los nombramientos de personal estatutario temporal que, de forma continuada o interrumpida, recaigan en una misma persona, no podrá superar el plazo de tres años", determina la reforma el texto. De esta manera, el Gobierno prevé "hacer fijos" a unos 67.300 sanitarios, dentro de "la mayor estabilización de los profesionales sanitarios de la historia del Sistema Nacional de Salud desde su creación".

La nueva ley sanitaria establece que, transcurridos tres años desde el nombramiento de un sanitario interino, esta vacante "solo podrá ser ocupada por personal fijo”. Habrá, sin embargo, algunas excepciones. Por ejemplo, cuando “el proceso selectivo correspondiente no se haya cubierto la plaza en cuestión, en cuyo caso se podrá efectuar otro nombramiento de personal estatutario interino”.

Procesos lentos

El Gobierno, por su parte, justifica que los procesos de selección para la contratación de sanitarios "son excesivamente lentos ocasionando, en muchos casos, la necesidad de provisión temporal de los puestos por el tiempo necesario hasta la cobertura efectiva”. "En estas condiciones, el recurso al nombramiento de personal interino y a la contratación de personal temporal se ha constituido en una alternativa organizativa que ha acabado suponiendo un incremento excesivo de la temporalidad", añade el texto. 

La norma intenta fijar límites a la contratación de interinos solo para "razones expresamente justificadas de necesidad y urgencia". Entre ellas, se encuentra que se podrá contratar a un interino para cubrir plazas vacantes "durante un plazo máximo de tres años" siempre y cuando "no sea posible" ubicar un empleado fijo.

También habrá interinos para "programas de carácter temporal" no superiores a tres años. Para blindar este asunto, el Ejecutivo detalla que estos programas "no pueden ser de una naturaleza tal que suponga la ejecución de tareas o la cobertura de necesidades permanentes, habituales de duración indefinida de la actividad propia de los servicios de salud”.

Otro supuesto en el que se permitirá la contratación de interinos es el "exceso o acumulación de tareas" por "un plazo máximo de nueve meses dentro de un período de 18 meses". En todos los anteriores supuestos, una vez se cumplan los tres años, la norma decreta que se tendrá que "tramitar la creación de una plaza estructural en la plantilla del centro”.

Sustitutos

La norma también abre la puerta a contratar a sustitutos que realicen "funciones propias" de funcionarios "durante los periodos de vacaciones, permisos, dispensas y demás ausencias de carácter temporal que comporten la reserva de plaza”. Igualmente para "la cobertura de exención de guardias, por razón de edad, o enfermedad, pudiendo sustituir hasta dos personas y siempre que con la plantilla disponible no fuese posible cubrir esta contingencia y respetando los límites legales de la jornada”. También se podrá contratar a un interino ante la reducción de la jornada ordinaria de funcionarios, "identificando a la persona o personas concretas a quien se complementa la jornada y durante todo el período correspondiente y la modalidad que motiva la reducción”.