El Juzgado de Primera Instancia nº 12 de València ha condenado a una aseguradora y a una empresa de aceitunas y encurtidos a pagar 1.950 euros, más los intereses correspondientes, a una asociada de la Unión de Consumidores por los daños que le ocasionó la rotura de una muela al morder parte de un hueso que se había quedado dentro de una aceituna que supuestamente era sin hueso, tal como señala la entidad de consumidores en un comunicado.
Los hechos ocurrieron cuando la afectada acudió con varios familiares a un restaurante valenciano, donde pidieron un aperitivo en el que se sirvieron, entre otras cosas, aceitunas rellenas sin hueso. Tras coger una, y mientras la masticaba, la mujer sintió un dolor repentino en una muela debido a que había mordido un hueso que había quedado dentro de la aceituna.
El dolor "se fue haciendo progresivamente más insoportable", destaca la Unión de Consumidores en su nota de prensa, hasta el punto de que al día siguiente tuvo que ir de urgencias al odontólogo. El especialista comprobó que "la muela afectada, previamente sana, estaba partida de arriba abajo y no quedaba otra solución que la inmediata extracción, y restauración de la misma, resultando una intervención laboriosa por el destrozo causado por el hueso de aceituna".
La mujer comunicó a los responsables del restaurante los daños que le había provcado la aceituna que le habían servido en el local, a lo que el dueño del establecimiento le dijo que el producto correspondía a una partida de aceitunas rellenas sin hueso adquirida a su proveedor habitual y que desde el restaurante sólo se habían limitado a servir el producto, sin manipulación alguna.
La empresa suministradora de las aceitunas no quiso pagar
En un primer momento, la Unión de Consumidores, en representación de la asociada, inició ante la empresa suministradora de las aceitunas rellenas sin hueso y la aseguradora una labor de mediación. La entidad reclamó por vía extrajudicial que le abonaran a la mujer el desembolso económico que le había supuesto el tratamiento y asistencia en la clínica dental. Dado que no llegaron a un acuerdo, se inició un procedimiento judicial en el que la afectada reclamó 1.550 euros en concepto de tratamiento, asistencia y restauración de la pieza dental dañada, así como 400 euros más por los daños físicos y morales ocasionados.
La sentencia por morder una aceituna rellena que tenía hueso obliga a pagar el tratamiento dental. Foto Pixabay
Tanto la empresa distribuidora de las aceitunas como su compañía aseguradora "rechazaron reiteradamente la reclamación" de la mujer, detalla la Unión de Consumidores, "pese a haber acreditado suficientemente los hechos y haber presentado informes y facturas de los daños ocasionados". Las empresas demandadas, añade, "desestimaron la reclamación con la esperanza de que nuestra asociada abandonara su reclamación, a pesar de tener la razón y a pesar del considerable perjuicio económico que se le había ocasionado".
Sin embargo, los servicios jurídicos de la Unión de Consumidores de la Comunitat Valenciana asesoraron a la mujer y, finalmente, interpusieron una demanda judicial. El juzgado de Primera Instancia nº 12 de València estimó la reclamación y ahora ha condenado a la empresa suministradora y a su aseguradora a pagar 1.950 euros a la afectada en concepto del tratamiento dental que tuvo que recibir y por los daños físicos y morales que sufrió. Asimismo, les condena al pago de los intereses legales y las costas del procedimiento judicial.
La Unión de Consumidores de la Comunitat Valenciana aconseja a todas las personas consumidoras que, ante el rechazo de su queja o reclamación, acudan a una asociación de consumidores para valorar las posibles alternativas cuando vean rechazada su reclamación o la mediación que hayan podido realizar antes los organismos públicos de consumo, y poder defender de forma efectiva, rápida y eficaz sus legítimos derechos.
