La Administración Obama parece estar dispuesta a hacer historia al aprobar la primera misión espacial privada más allá de la órbita de la Tierra.

Según fuentes conocedoras de la iniciativa, citadas por Wall Street Journal, el apoyo del gobierno eliminaría el obstáculo regulatorio más importante para los planes de Moon Express, una "relativamente oscura 'startup' espacial", que pretende enviar a la superficie lunar 9 kilos de equipo científico el próximo año.

La decisión también proporcionaría el mayor impulso federal a la exploración privada no tripulada del espacio y, potencialmente, el primero de una serie de empresas con fines de lucro en todo el sistema solar.

La decisión de establecer precedentes legales y diplomáticos importantes en relación a cómo Washington asegurará que tales proyectos cumplan con los tratados internacionales espaciales.

La aprobación de una licencia oficial de lanzamiento para la segunda mitad de 2017 sigue estando a meses de plazo, y la misión propuesta plantea enormes obstáculos técnicos para Moon Express, incluyendo el hecho de que el cohete que quiere usar aún no ha volado.

Pero los proponentes del proyecto han considerado que el proyecto del aterrizador MX-1 del tamaño de una maleta y su carga útil, así como la aprobación de una operación planificada de dos semanas sobre la luna misma, plantean los retos legales más significativos para la misión.

Después de meses de gestiones de influencia de los responsables de Moon Express y deliberaciones de alto nivel entre las diversas agencias federales dirigidas por la oficina de Ciencia de la Casa Blanca, la compañía está cerca de obtener lo que se ha llamado "la aprobación de la misión".

La decisión oficial coordinada a través de la Administración Federal de Aviación, que regula los lanzamientos de cohetes de Estados Unidos y es responsable de las revisiones de la carga útil, podría llegar en las próximas semanas.