Q­ue los tatuajes están de moda es algo que ya resulta bastante evidente. El auge que ha experimentado éste sector y la proliferación de establecimientos abiertos, no solo en toda la Región de Murcia sino también fuera de ella, son ya una evidencia. Cada vez es más frecuente encontrarse con alguien que lleva un tatuaje a la vista o en alguna parte de su cuerpo menos visible.

En todo caso, ¿qué lleva a una persona a hacerse un tatuaje? Según algunos profesionales, si antes eran más bien motivos puramente estéticos o artísticos, ahora el perfil de cliente ha cambiado ligeramente y se busca más un equilibrio entre lo estético y aquel motivo que supone también algo emocional. No es que la opción de decorarse el cuerpo con un elemento artístico y que resulte bello para otra persona se haya descartado de forma radical, pero sí han cambiado de un modo sensible las tendencias de quienes escogen tintar su cuerpo. Así,el tatuador Jaggo explica que «se puede decir que la mayoría de clientes buscan un equilibrio entre lo estético y lo emocional. De un tiempo a esta parte, se puede apreciar más que el deseo de tatuarse va impulsado por motivos personales que mueven a la gente a acercarse al estudio, aunque siempre está el público que busca decorar zonas de su cuerpo con temas netamente artísticos».

Por otro lado, cabe también preguntarse si quien desarrolla esta labor, el tatuador, debe ser o no un artista. Y aquí hay varios puntos de vista según el profesional con quien se hable, pero parece claro que si lo que se está haciendo es un motivo artístico, quien lo hace debe ser considerado artista. Jaggo lo sintetiza así: «para poder ofrecer un trabajo de calidad que está directamente relacionado con el arte, pienso que es muy importante ser consciente de que si un tatuador dispone de talento artístico para el dibujo ofrecerá un resultado óptimo, ya que tatuar no sólo implica trabajar con la aguja y la tinta sobre la piel, hay que ver más allá, tener perspectiva, saber trabajar los colores y degradados, tener claras las proporciones del boceto, saber cómo afecta a la zona del cuerpo donde se va a colocar el tatuaje para que la imagen no se deforme o se deteriore€ es muy importante el criterio y el talento artístico para ser un buen tatuador", concluye.

Cuidados durante 15 días

En cuanto a los cuidados que hay que llevar a cabo una vez que alguien se ha hecho el tatuaje, cabe destacar igualmente que se debe ser especialmente celoso para ahorrarse posteriores disgustos. Los profesionales de este sector coinciden en que además de proteger la zona que ha sido tintada, también se debe lavar varias veces al día con agua y jabón neutro (hay que evitar siempre el jabón perfumado), así como aplicar una crema hidratante durante al menos 15 días. Y, por supuesto, evitar que el tatuaje reciba la luz directa del sol ya que podría afectarle.