La investigadora María García-Parajo, líder del Laboratorio de Bionanofotónica del IBEC, ubicado en el Parque Científico de Barcelona, ha explicado en un comunicado que este nuevo avance puede suponer una "auténtica revolución" en la investigación biomédica, ya que por primera vez permite estudiar las interacciones que se producen a escala molecular.

"Nuestro objetivo es diseñar e implementar sistemas que permitan estudiar la dinámica y organización de las moléculas a nivel individual y a escala nanométrica en su entorno natural, así como manipular sus funciones biológicas", ha señalado García-Parajo, cuyo trabajo se publicará mañana en la edición digital de la revista científica "Nature Photonics".

En concreto, lo que ha desarrollado el equipo científico del IBC es una nanoantena, una herramienta óptica que permite concentrar la radiación óptica y aumentarla en un área muy pequeña a través de una antena que ejerce un efecto de resonancia y amplifica el campo de luz, aumentando su intensidad en la parte final, lo que permite visualizar la actividad celular a una escala de diez nanómetros.

Las nanoantenas ópticas forman parte de los primeros resultados que obtiene el proyecto Bio-Light-Touch, incluido en el programa marco de la unión Europea.

Su objetivo final es el desarrollo de un nuevo tipo de microscopio óptico que no sólo permita visualizar la dinámica intermolecular en células vivas, sino también caracterizar sus funciones bioquímicas.

En el proyecto, coordinado por María García-Parajo, participa un equipo multidisciplinario de físicos, biólogos y técnicos de universidades, centros de investigación y empresas de varios países europeos, entre los que, además de España, se incluyen Austria y Holanda.