Así lo ha indicado hoy el director del equipo de investigación "Primeros Pobladores de Extremadura" durante la presentación de los resultados de la séptima campaña de excavación de la Sala de los Huesos de la Cueva de Maltravieso.

Según ha especificado, el hallazgo de las conchas, de las especies litorina y patela, se produjo en 2006, han sido sometidas a un exhaustivo estudio, y ponen a las Cuevas de Maltravieso como "una referencia en Extremadura y España a la hora de analizar restos del Paleolítico Superior".

Canals ha precisado que el hallazgo tuvo lugar en la estancia denominada Sala de las Chimeneas, y que es fruto de la actividad llevada a cabo "por los pintores que hace 22.000 años efectuaron las famosas manos de Maltravieso".

En este sentido, ha indicado que las conchas fueron traídas "expresamente" al entorno de la excavación arqueológica, "ya que son marinas, no proceden del Calerizo", y ha añadido que son fruto del "comercio, o intercambio, entre tribus de esta ubicación geográfica, y otras procedentes de la costa".

"El estudio detallado de estas dos conchas -ha subrayado-, propician que por primera vez en Extremadura existan restos culturales del Paleolítico Superior", y ha concluido que algunos de los "pintores de las manos", perdió esas conchas en su deambular por la cueva, "que seguramente formaban parte de un collar o una pulsera".

En opinión del paleontólogo, el descubrimiento de estos dos objetos hace plantearse la continuidad de los trabajos arqueológicos en la Sala de las Chimeneas, trabajo que, según dijo, "se ha visto restringido por la decisión adoptada por una comisión dependiente de la Junta de Extremadura".

El objetivo de esa comisión, según ha reconocido, es guardar un equilibrio entre los trabajos que desarrolla el proyecto Primeros Pobladores de Extremadura y la protección del enclave arqueológico.

Sin embargo, Canals ha asegurado que "por decisión de esta comisión, hace dos años que no se excava en la Sala de las Chimeneas y esto dificulta la continuidad del desarrollo de estos conocimientos en base a estos objetos hallados, "que son la punta de un iceberg enorme", ha concluido Canals.