El objetivo de esa reunión de dos días del llamado Grupo de los 20 (G20), en el que se incluyen España, México y Brasil, será buscar soluciones efectivas contra el cambio climático para la era post-Kioto, que comienza a partir de 2013.

Por parte española participa en el encuentro el secretario general de Cambio Climático, Arturo Gonzalo, junto al brasileño Sergio Serra, embajador especial para el cambio climático, y el mexicano Mauricio Limón Aguirre, subsecretario de Gestión para la Protección Ambiental.

Los participantes de este encuentro, al que asistirán representantes de 16 países y el ex primer ministro británico Tony Blair, tratarán de establecer una línea de acción contra el calentamiento global, para renovar así el compromiso adquirido con el medio ambiente a través del protocolo de Kioto.

Este acuerdo internacional obliga a los países industrializados a que reduzcan sus emisiones de gases productores de efecto invernadero entre un 6 y un 8 por ciento en comparación con sus cifras de 1990.

Entre los países que acudirán a la conferencia destacan Brasil, China, Francia, Alemania, la India, Japón, Rusia y Corea del Sur, responsables del 80 por ciento de las emisiones mundiales de CO2.

Estados Unidos, que también participa de las reuniones, fue el único de los grandes países industrializados que no rubricó el protocolo de Kioto, pero ha sido el principal impulsor de la cumbre de dos días de Chiba.

El presidente de EEUU, George Bush, propuso en 2007 que las 20 economías más importantes del mundo, que se reunieron en septiembre en Washington y en enero en Hawai, organizaran también conferencias sobre energía y medio ambiente.

De esta manera, uno de los países que más gases contaminantes emiten trataba de frenar las críticas recibidas tras no haber firmado el protocolo de Kioto y mostrar así su compromiso de acción consensuada y a largo plazo contra el calentamiento global.

Como antesala a las reuniones del fin de semana y a la cumbre del G8 en julio, algunos de los representantes de los países participantes se reunieron hoy en el centro internacional de conferencias japonés Makuhari Messe, en Chiba.

Se trató de una cita previa a la Cuarta Cumbre Ministerial del Diálogo de Gleneagles del G8 sobre Cambio Climático, Energía Limpia, y Desarrollo Sostenible, conocido como G20 desde 2005, cuando se celebró la primera de las reuniones en el Reino Unido.

Tras la primera toma de contacto, los participantes en las reuniones acudirán esta noche a una cena oficial en un hotel cercano al centro de conferencias, ofrecida por el ministro nipón de Exteriores, Masahiko Komura.

La cumbre del G20 dará comienzo mañana con un discurso sobre el cambio climático del ex primer ministro Tony Blair.

Japón albergará entre el 7 y el 9 de julio de este año la cumbre del G8 (países más industrializados y Rusia) en la región montañosa del lago Toya en la isla de Hokkaido, al norte de Japón.

Las autoridades niponas han manifestado en varias ocasiones su deseo de liderar la lucha contra el calentamiento global.

Sin embargo, por el momento este país está lejos de alcanzar los compromisos adquiridos en 1997 a través de la ratificación del protocolo de Kioto.