El año de la Patrona

Cartagena vive hoy su día más intenso en el que se suceden las actividades procesionistas y en honor a su ‘madre’, pues fue hace tres siglos exactos, en el año 1723, cuando llegó a esta tierra la imagen encargada por el Santo y Real Hospital de Caridad al imaginero Giacomo Colombo. Además, se cumple el centenario de su primera coronación canónica (1923). Por este motivo, las celebraciones habituales en esta jornada serán potenciadas en una jornada en la que, de forma paralela, hay tres procesiones. En la pasada madrugada debe haberse llevado a cabo el vía crucis del Cristo del Socorro y por la tarde tendrá lugar el que lleva a cabo por la ciudad la asociación del Cristo de la Divina Misericordia (salida a las 18 horas), mientras que por la noche (21 horas) llegará el primer cortejo californio.

El encargo al escultor italiano fue de una Virgen de los Dolores (la talla que llegó se asemejaba realmente a la iconografía de la Virgen de la Piedad o de las Angustias) en madera policromada para el Hospital de Caridad, pero, pese a que la Virgen del Rosell era la patrona de Cartagena, la devoción hacia la imagen fue en aumento y se popularizó su nombre en una contracción linguística, pues de la ‘Virgen del Hospital de la Caridad’ pasó a la ‘Virgen de la Caridad’, que es como quedó identificada. Es más, muchas familias, dada esa empatía, pusieron a sus hijas el nombre de Caridad, el cual sólo es habitual por estos lares. El Ayuntamiento de Cartagena, dada esta gran devoción, acordó en 1761 la celebración del Viernes de Dolores. Un año más tarde se añadió la entrega de la ‘Onza de oro’, que es la aportación anual del consistorio al hospital. 

Resulta también curioso que la Virgen de la Caridad es la patrona de una tierra con siete patronos, pues ese título no lo llegó a perder la Virgen del Rosell y lo mantienen también San Ginés de la Jara y los cuatro santos, los hermanos San Isidoro, San Fulgencio, Santa Florentina y San Leandro.

El hospital se había inaugurado tres décadas antes (1693), con lo que este año llega a su 330 aniversario, mientras que la iglesia (hace unos años declarada basílica menor) fue estrenada en 1893 (hace 130 anualidades), habiendo sido sometida en los últimos años a una profunda (y costosa) rehabilitación. 

Además de los actos especiales que tendrán lugar este año, hay que destacar el gran desfile de los cartageneros por la tarde para llevar flores a su madre, siendo el cortejo que más vincula a los pueblos del municipio cada año, siendo protagonizado por numerosos colectivos que aglutinan a unas dos mil personas, luciendo muchas trajes típicos, lo que enriquecen algunos también con bailes tradicionales.