­¿Es cierto que la fertilidad del ser humano cada día es menor?

Sin duda. La vida moderna tiene efectos negativos sobre la fertilidad. En el mundo occidental e industrializado la fertilidad se ha reducido, y no solo por factores sociales sino por factores tóxicos medioambientales como el tabaco, el alcohol, la contaminación, incluso la obesidad, tanto en hombres como mujeres. Se han publicado estudios sobre los posibles efectos negativos de las ondas que emergen de los teléfonos móviles sobre la zona testicular. La vida está cambiando mucho y la fertilidad disminuye. Actualmente la infertilidad afecta a un 15% de parejas, pero estimamos que en el año 2020 afectará a un 20-25%.

Buscar el embarazo después de los 35 años, ¿es un gran problema para la pareja?

La edad tiene gran repercusión sobre las posibilidades de tener un embarazo. De media, la tasa de embarazo a término con niño vivo y sano en mujeres de menos de 35 años es del 50%, pero en mujeres de 37 años ya disminuye a un 30%, y en mayores de 40 años es de solo un 15%. Es muy importante que la mujer conozca la importancia que tiene su edad sobre la fertilidad y lo tenga en cuenta en su planteamiento de vida. Es necesario informar de ello a las mujeres en general, pero también sería muy necesaria la existencia de medidas sociales que permitiesen a la mujer compatibilizar su vida profesional y laboral con su maternidad.

¿Se pueden congelar óvulos en mujeres jóvenes para posponer su maternidad?

Hoy es técnicamente posible congelar óvulos con excelentes resultados. La mujer se sometería a un tratamiento de estimulación ovárica para obtener un buen numero de óvulos que congelaremos y guardaremos hasta que ella decida ser madre. Podría ser madre a los 37 años, incluso a los 40, cuando quisiera, pero con la diferencia de que los óvulos tendrían la edad joven en la que se congelaron, es decir, dispondríamos de óvulos jóvenes, con un potencial de éxito tremendo.

¿Qué pruebas diagnósticas se realizan a las parejas que acuden a su clínica?

Al varón, un análisis de semen, pruebas infecciosas y genéticas. A la mujer, pruebas hormonales y ecográficas para valorar su reserva ovárica y un estudio de sus trompas. Esto sería el primer paso. Intentamos simplificar cada vez más los estudios, pero, eso sí, proporcionando toda la información que la pareja necesita.

¿Cuántas veces puede una mujer someterse a un tratamiento de fertilización in vitro?

No hay un límite establecido de ciclos, pero el 70% de las mujeres que quedan embarazadas lo consiguen en los primeros intentos. Más allá de cuatro intentos, las posibilidades de embarazo se reducen sustancialmente.

Los equipos de reproducción humana tienen que tener una gran preparación y experiencia profesional. ¿Cuál es la suya?

Ya de muy joven, por el año 1982, realicé mis primeros trabajos en experimentación animal sobre fertilización in vitro en roedores en la Facultad de Medicina de Murcia, que fueron publicados y expuestos por mí en el IV Congreso mundial sobre fertilización in vitro que se celebró en Melbourne (Australia). A nivel de investigación, he publicado más de 60 trabajos científicos en revistas nacionales e internacionales y 40 capítulos de libros, además de exponer más de 100 ponencias como invitado en congresos nacionales e internacionales vinculados a la reproducción. Como clínico atendí la unidad de Endocrinología Ginecológica y de la Reproducción del Hospital Virgen de la Arrixaca durante 25 años. Formé parte de la Junta Directiva Nacional de la Sociedad Española de Fertilidad (seis miembros) ocho años. Como docente fui profesor colaborador y profesor asociado clínico de Obstetricia y Ginecología durante 24 años en la Facultad de Medicina de Murcia. Actualmente tengo la gran satisfacción de poder dirigir el equipo de la Unidad de Reproducción Asistida del Hospital La Vega de Murcia.

¿Qué pacientes acuden a la Unidad de Reproducción del Hospital La Vega?

A nuestra Unidad puede consultarle cualquier pareja que lo solicite y de cualquier procedencia. Esta primera visita no tiene costo económico alguno. Estos pacientes privados son remitidos, bien por ginecólogos o urólogos que confían en nosotros, o bien conocidos o amigos que ya han venido y han conseguido el embarazo. También mantenemos una estrecha colaboración con Asisa.

Para acabar, ¿cómo puede influir la crisis económica en estos tratamientos? ¿Son tratamientos para ricos y no para pobres?

Pregunta delicada en los tiempos que corren. En Alemania ya en el 2004 redujeron las prestaciones públicas económicas para estos tratamientos, lo que causó un descenso de casi el 50% de los ciclos realizados. Dinamarca introdujo el copago para reproducción asistida y motivó un descenso del 30% de tratamientos. En España, en Cataluña, recientemente, en noviembre del 2011, disminuyó el consumo de los medicamentos necesarios para reproducción en más del 20%. Esto puede ser un reflejo de lo que va a acontecer en España en los próximos años. Nosotros sólo atendemos a pacientes pertenecientes al sector privado y en estos últimos años hemos atendido a más de 2.000 parejas. Somos el único centro de reproducción de la comunidad murciana que realiza la totalidad de los tratamientos en un ambiente intrahospitalario, con lo cual hemos conseguido aumentar considerablemente la seguridad, tranquilidad y eficacia en nuestras parejas. La travesía del desierto será larga, pero nuestro grupo confía en mejorar la gestión, la eficiencia y la ética preparándonos para un futuro mejor.