En el CRA Río Argos, ubicado en la pedanía ceheginera de Valentín y cuyo alumnado se encuentra también en las pedanías de Canara y Campillo de los Jiménez, se han propuesto que los niños y niñas vivan al máximo todas y cada una de sus experiencias en el aula, mediante la puesta en marcha de distintos proyectos innovadores.
En esta ocasión, para celebrar el Carnaval, cuya temática seleccionada ha sido las edades históricas, se ha puesto en marcha un proyecto basado en las inteligencias múltiples de Gardner, que ha permitido a los alumnos conocer los aspectos más relevantes de la edad histórica asignada.
Más concretamente, el alumnado de 1º y 2º ha participado en la búsqueda de herramientas típicas de la Prehistoria, pinturas rupestres, collares y otros utensilios, siguiendo un plano del centro educativo en el que se encontraban escondidos. De este modo tan sorprendente y motivador para los niños y niñas, se ha trabajado la inteligencia espacial.
También han disfrutado mucho moldeando los animales más típicos de la época, que posteriormente han identificado con su nombre y que ha permitido trabajar la inteligencia naturalista.
Con todo lo anteriormente citado, han construido su propio rincón de la Prehistoria, en el que se han convertido en verdaderos protagonistas, tras elaborar su propio autorretrato de cavernícolas, profundizando así en la inteligencia intrapersonal.
Además, se han divertido muchísimo dramatizando la evolución del hombre, cuya actividad estaba directamente relacionada con la inteligencia cinestésica.
Para trabajar la inteligencia interpersonal, se han planteado problemas que debían resolver mediante técnicas de aprendizaje cooperativo, lo que les ha permitido alcanzar soluciones realmente sorprendentes para niños y niñas de tan corta edad. Así, mediante debates y lecturas relacionadas con la Prehistoria, también se ha trabajado la inteligencia lingüística.
El alumnado también ha resuelto de forma sorprendente varios retos matemáticos relacionados con la edad asignada, lo que ha permitido trabajar la inteligencia lógico-matemática.
Por supuesto, no podían olvidarse de trabajar la inteligencia musical, mediante la visualización de distintos vídeos que les han permitido conocer cómo nació la música, el canto, el ritmo y el baile. Además, siendo conscientes de que las canciones fomentan el aprendizaje y aumentan la concentración y la memoria, los niños y niñas han aprendido los aspectos más notables de la Prehistoria, mediante una canción y la interpretación de una coreografía que aprovecharán para interpretar en su próximo desfile de Carnaval.
De este modo tan divertido y motivador para los niños, se ha transformado lo que podría haber sido una simple actividad complementaria de una jornada, en un proyecto que dará un sentido completo a sus disfraces.
