El CEIP Villa Alegría participa en el programa piloto de compostaje doméstico que puso en marcha el Ayuntamiento de San Pedro del Pinatar. Esta iniciativa pretende reducir la cantidad de basura orgánica y reutilizar los desechos orgánicos para elaborar compost y utilizarlo como abono en el huerto ecológico.

mi basura es un tesoro

En este proyecto participa toda la comunidad educativa. Las familias traen los desechos orgánicos (mondas de frutas, restos de verduras, cáscaras de huevo, posos de café, bolsas de infusiones y restos de podas) y los depositan, martes y jueves, en un contenedor que hay en la entrada del centro. Por su parte, los alumnos separan los restos orgánicos de sus almuerzos para que sean depositados en la compostera.

Durante el periodo de recreo un equipo de alumnos voluntarios, acompañados por la profesora responsable del proyecto, se encargan de recoger y depositar las aportaciones realizadas en la compostera, así como de controlar su temperatura y grado de humedad utilizando un aireador o humedeciendo si fuera necesario.

Al inicio del nuevo curso los alumnos de Primaria son los encargados de cribar el compost, separando los restos que no están totalmente descompuestos. Finalmente, esa gran cantidad de restos orgánicos de variados colores se convierten en un sustrato oscuro que huele a tierra húmeda y a bosque.

Ha sido una experiencia que ha captado el interés de alumnos y familias. En su primera visita, algunos alumnos no quieren acercarse, sin embargo los comentarios de los compañeros de sus compañeros despiertan su curiosidad. «¿Por qué sale humo?», «¿por qué huele a naranja?», se preguntan.

Después de un largo proceso se cierra el círculo y se devuelven a la tierra los nutrientes que ella aportó a los cultivos del colegio. De esta forma los alumnos realizan pequeños gestos cotidianos respetuosos con el medio ambiente y que favorecen la economía circular.