La Gran Esfinge de Guiza? es una monumental escultura que se encuentra en la ribera occidental del río Nilo, en la ciudad de Guiza, unos veinte kilómetros al suroeste del centro de El Cairo. Los egiptólogos estiman que fue esculpida c. siglo XXVI aC, formando parte del complejo funerario del rey, durante la dinastía IV de Egipto. Los lugareños la llamaban Abu el-Hol 'Padre del Terror', corrupción de la expresión copta bel-hit, que se aplica a quien manifiesta su inteligencia en los ojos y que traduce la denominación egipcia hu o ju, que significa 'el guardián' o 'vigilante'.

La Gran Esfinge se realizó esculpiendo un montículo de roca caliza situado en la meseta de Guiza. Tiene una altura de unos 20 metros aproximadamente, y unos 70 de longitud. La cabeza podría representar al faraón Kefrén, teniendo el cuerpo la forma de un león. En épocas antiguas estaba pintada en vivos colores: rojo el cuerpo y la cara, y el nemes que cubría la cabeza con rayas amarillas y azules.

Se construyó un templo frente a la estatua, datado en el Imperio Antiguo, y otro más al norte, junto a la esfinge, durante el Imperio Nuevo, como lugares de ofrendas a la 'imagen viviente'. Kefrén eligió un templo en la zona sur, que está comunicado con su pirámide mediante una larga avenida procesional. Gozó de veneración y culto por los egipcios desde la antigüedad, especialmente durante el Imperio Nuevo.

Fue identificada con el dios extranjero Horum, y con el dios egipcio Horus como Hor-em-Ajet, o Harmajis, 'Horus en el horizonte'. En lengua árabe la denominaron Abu el-Hol 'Padre del Terror'. El epíteto dado por los egipcios a las esfinges era shesep-anj, 'imagen viviente'.

Se tiene constancia de restauraciones desde la dinastía XVIII, durante el Imperio Nuevo. Los estratos calizos inferiores se descomponen fácilmente con la humedad del ambiente, pero la arena arrastrada por los vientos del desierto cubrió su cuerpo periódicamente, protegiéndola de la erosión durante siglos.

En 1920 ingenieros franceses repararon una enorme grieta en la parte posterior del cuerpo, sellaron un agujero en la parte superior de la cabeza y colocaron contrafuertes de hormigón alrededor del cuello por temor a que se desprendiera la cabeza.