El CEIP Nuestra Señora de La Paz se caracteriza por ser un espacio de convivencia multicultural, bajo el principio de inclusión. La atención a la diversidad se convierte en el eje vertebrador que impregna y determina el quehacer diario, siendo una de las principales señas de identidad que definen al colegio como centro de actuación educativa preferente. Ahora, ha puesto en marcha el programa de comunicación emocional 'La Casa de la Palabra: cómo crear lazos afectivos en el aula'.

El equipo directivo explica que «con esta propuesta tratamos de trabajar en la regulación de la conducta con actividades pro-convivencia, aplicar metodologías de trabajo coordinado y cooperativo, que nos permitan compensar y adaptar el proceso de enseñanza-aprendizaje, dando una respuesta educativa adecuada a las necesidades de nuestro alumnado».

¿Cómo trabajar con los alumnos para ayudarles en la gestión de las emociones? Para ello, empiezan reflexionando sobre ellos mismos y los demás; también sobre cómo se relacionan con sus semejantes y diferentes, y los lazos a través de los cuales establecen su «vínculo emocional». «A partir de ahí, tomamos la metáfora de la Casa de la Palabra, la cual nos conecta con la comunicación y nos ayuda a tomar conciencia acerca de la necesidad de asumir la responsabilidad de 'lo que decimos y de cómo lo decimos'.

En cada clase tenemos un mural con nuestra casa de la palabra y en ella colocamos las llamadas 'palabras y expresiones dardo', es decir, las que hieren y hacen sufrir: 'no es posible', 'es inútil', '¡tonto más que tonto!', 'eso es así y basta', 'no tienes razón'€», comenta el equipo directivo.

«El siguiente paso consiste en analizar las 'palabras y expresiones puente' que nacen de la reflexión y del silencio, palabras alternativas a las anteriores, como, por ejemplo: 'tú puedes', 'confío en ti, ¡ánimo! ¡adelante!', 'te lo agradezco', 'llegarás lejos'€ Estas palabras curan, consuelan, animan y nos vinculan a los demás. Cada aula crea su propia Casa de la Palabra».