Fechas señaladas

Todos recordamos y tenemos señalado en el calendario fechas que significan mucho para nosotros: cumpleaños, aniversario de boda, de ruptura, el día que tu equipo ganó el doblete de copa y liga o el que te levantaron una Champions en el minuto 93. Una fecha profesional importante, un diagnóstico, hitos históricos con los que nos sentimos conectados por lo que han significado en nuestra sociedad. También las tradiciones y cómo las vivimos según donde hayamos nacido forman parte de nuestro calendario. Desde que llegamos a este loco mundo, las fechas marcan nuestra vida. Las navidades en casa de los abuelos, las fiestas típicas de la ciudad donde vives o del lugar donde te has criado y al que vuelves para encontrarte con los de siempre, aquellos veranos de tres meses en la playa o la Semana Santa, nos conectan directamente con nuestra historia, con los que ya no están, con nuestras raíces.

Todos recordamos dónde estábamos y con quién la primera Nochevieja que sales de cotillón, el día de su boda, (quien haya cometido la locura de casarse), el nacimiento de tus hijos o sobrinos. Cuando te llamaron para decirte que sí a tu primer trabajo, cuando te dijeron que los ganglios no estaban afectados, o cuando recibes la llamada de la pérdida de alguien de manera inesperada, esa llamada nunca se olvida y dónde estabas tampoco. Desgracias como el atentado del 11M en Madrid o el 11S y las Torres Gemelas, días que cambiaron la historia, donde nada volvió a ser lo mismo para las víctimas y sus familias, y para todos nosotros. Yo recuerdo qué hacía y dónde estaba ambos días, seguro que tú también.

El día que te vas de casa, dejas tu ciudad y te marchas a vivir lejos de los tuyos, el día que nos encerraron ante la llegada de una pandemia mundial. El día que pudimos volver a abrazar a nuestros seres queridos, si viviste lejos de casa el confinamiento. El día que viste un concierto que te marcó para siempre. Tengo muchos días que recordar vinculados a la música; de los recientes, me quedo con el 28 de septiembre de 2024, concierto en Granada de Los Planetas, gira Súper 8. Los vasos volando al sonar Mi hermana pequeña, una cartásis de cuarentones maravillosa. El día que pasamos en Granada, sus míticos rincones, un grupo de amigos y desconocidos que se convirtieron en amigos en un callejón, donde Morente vive.

¿Cuáles son tus fechas señaladas? En mi caso, el día que mis padres se casaron, sus cumpleaños, el de mi hermano y mis sobrinos. En casa también celebramos el día de nuestro santo, San José, Santa Catalina de Siena o el mío, que siempre lo celebramos la noche de Nochebuena. Recuerdo el día de mi comunión y esa celebración sencilla en casa, en familia, con churros con chocolate; eran otros tiempos. Las Semanas Santas en Lorca, cada jueves de serenata y viernes santo, por la mañana en el Nogalte, la visita a San Francisco, la emoción de la recogida de banderas, ver la procesión agitando el pañuelo azul y quedándome afónica, ver pasar al Cristo yacente y a la Virgen de los Dolores subir la cuesta, acompañarlos acordándome de los míos. Todos tenemos esas fechas en las que continuamos las tradiciones familiares, con o sin creencias religiosas, queriendo mantener vivo lo que nos conecta con nuestra historia, lo que nos conecta con los que ya no están y de este modo mantenemos su recuerdo.

Hoy es 20 de abril; más allá de la canción de Celtas Cortos, hace 11 meses que te fuiste. Se aproxima el aniversario de tu muerte, mi primer año sin ti, mamá. Estoy en la fase de contar los meses, son tantos los recuerdos que vienen a mi memoria. Recuerdo el último día que salimos a pasear, las conversaciones en la cocina, o sentadas juntas en el salón. Recuerdo el momento en el que empeoraste y los días antes de irte. El día y la hora exacta que en casa se hizo el silencio al apagar la máquina de oxígeno. Tu cuarto está igual que cuando te fuiste, aún no he podido ordenar. Esta semana abrí un armario buscando sábanas, también busqué tu olor. Hay fechas señaladas que nos sacan una sonrisa, otras nos asombran al darnos cuenta de lo rápido que pasa el tiempo, otras nos duelen profundamente. Todas son nuestras fechas señaladas, parte de nosotros, de nuestro calendario, de nuestra vida.