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Opinión | Tribuna Libre

Portavoz de la plataforma Pro Soterramiento

Cine Rex: concatenación represora con premeditación

¿Qué interés mueve al equipo de Gobierno municipal para arrollar una movilización ciudadana legítima y pacífica, a la que le ha negado el pan y la sal sin ni siquiera recibir a sus gestores en ningún momento?

Fachada del Cine Rex de Murcia.

Fachada del Cine Rex de Murcia. / L. O.

Aun a riesgo de no ser original, «No pasemos página, Sr. Ballesta» y equipo de Gobierno municipal, con el Cine Rex.

El movimiento ciudadano que desde hace un quinquenio viene defendiendo la reapertura del último cine histórico de la ciudad de Murcia, y el único que permite el acceso a las personas con movilidad reducida a este capítulo de la cultura, está desligado desde su origen de dependencia de partidos políticos. Sin embargo, ante el cariz que estaban tomando los hechos y de haber sido ignorada por el actual equipo de Gobierno municipal, que le ha negado el diálogo, la plataforma Cine Rex Vivo admitió la vía de acceso al Parlamento regional para pedir su apoyo a la apertura del proceso de declaración de BIC del Cine Rex, que recientemente nos fue denegado por el director general de Patrimonio Cultural de la CARM.

A pesar de ser conscientes del nivel de crispación y polarización existente actualmente en los foros llamados a dialogar, debatir, tomar acuerdos y hablar -como deberían ser los Parlamentos-, pero que sólo se atienen al peso de los votos de cada grupo, sin ninguna consideración a razón o reflexión juiciosa, el pasado 18 febrero acudimos a nuestra Asamblea Regional con la esperanza de que pudiera surgir un hilo de cordura que pudiera favorecer que la voz de la ciudadanía fuera escuchada por nuestros legisladores. Los medios han informado y se impone la evidencia de que volvió a prevalecer la dinámica del no entendimiento. Lamentablemente, Murcia ha vuelto a ser el hazmerreír de España en espacios televisivos y mediáticos con la intervención absolutamente desmedida, cutre y fuera de lugar de quien se tomó el lujo de insultar a los ciudadanos promotores de la moción y a los amantes del cine actual: Antonio Martínez Nieto, diputado de Vox.

Y, mientras tanto, la maquinaria administrativa, tan lenta e ineficaz en otras ocasiones, acelera su funcionamiento en favor de un interés de parte, como es acceder al cambio de uso del Cine Rex, desoyendo los requerimientos de la ciudadanía y de quienes defienden la historia y los derechos generales de esta ciudad. El jueves 20 de febrero, el BORM publica, ya tajante e implacable, la Modificación del Plan Especial de Protección del Centro Histórico de Murcia para cambiar la protección legal del Cine Rex. Con lo que nos vemos abocados a un nuevo plazo de información pública de un mes para la presentación de alegaciones y/o sugerencias, que no sabemos qué frutos nos aportarán, pues todo ello es promovido por nuestro Ayuntamiento, cuando acaban de entrar en registro más de 3.400 recursos de alzada ante el director general de Patrimonio Cultural, que en buena lid democrática deben ser atendidos y respondidos por la Administración regional. 

Ante esta dinámica administrativa del Ayuntamiento de Murcia, no podemos menos que preguntarnos ¿Qué interés mueve al equipo de Gobierno municipal para arrollar una movilización ciudadana legítima y pacífica de más de un lustro, a la que le ha negado el pan y la sal, sin ni siquiera recibir a sus gestores en ningún momento? ¿Cómo puede comprender y «digerir» esta farragosa situación la ciudadanía que ha venido apoyando esta demanda social?

La plataforma Cine Rex Vivo no va a declinar en su defensa por una ciudad amable con sus servicios cercanos a sus usuarios -también los culturales, de los que el Cine forma parte- y, en esa dirección, queremos clarificar cuál es la situación a la que la Administración competente, el Ayuntamiento, nos ha abocado. Con la benevolencia de los amables lectores, creemos conveniente hacer un poco de historia, para no perdernos en la desmemoria:

Durante más de cinco años, la plataforma Cine Rex Vivo ha recorrido quincenalmente el área urbana más céntrica de la ciudad: Santo Domingo, Trapería, Glorieta, Plaza Cetina y Cine Rex, tratando de concienciar a la ciudadanía del problema de la supresión del único cine histórico con acceso universal para todo tipo de usuarios, incluso los de movilidad reducida.

Damos fe del apoyo ciudadano a nuestra reivindicación con un dato tan evidente como la recogida de 13.000 sugerencias personalizadas suscritas individualmente, en el procedimiento de tramitación de consulta pública para la evaluación ambiental del Proyecto de avance de la modificación del Plan Especial del Conjunto Histórico de Murcia, en lo relativo a la ficha del Cine Rex, publicado en BORM de 25 de abril de 2023, con un recurso tan mínimo e insubstancial como una mesa instalada en la plaza de Santo Domingo, hasta que nos fue prohibida por la Policía Local, cumpliendo órdenes de la Alcaldía de Murcia.

El 2 julio de 2024 se da curso a la solicitud de declaración de Bien de Interés Cultural del Cine Rex de Murcia, elaborada por técnicos de ganado prestigio en el seno de la plataforma Cine Rex Vivo.

Con el apoyo de la Fundación Mediterráneo y de la Universidad de Murcia, durante los días 18 y 19 de noviembre pasado, hemos celebrado unas jornadas conmemorativas del 110 aniversario del Cine Rex, con participación de personalidades destacadas del mundo de la cultura, como Francisco Jarauta o Manuel Delgado.

El 8 enero de 2025, el director general de Patrimonio Cultural resuelve denegar el inicio del proceso de apertura de declaración de Bien de Interés Cultural del Cine Rex, independientemente de un resultado hipotéticamente favorable o no de tal proceso.

El 28 enero de 2025, el equipo de Gobierno del Ayuntamiento de Murcia decide apoyar el cambio de uso del Cine Rex.

El 18 febrero de 2025, la sesión plenaria de la Asamblea Regional de la Comunidad Autónoma acoge la lectura y debate de una moción en apoyo a la apertura del proceso administrativo de declaración de BIC del Cine Rex.

El 20 de febrero de 2025, el BORM publica la Modificación del Plan Especial de Protección del Centro Histórico de Murcia para cambiar la protección legal del Cine Rex.

No creo que hiciera falta que Sherlock Holmes nos ayudara a descifrar este galimatías, porque es un ejemplo de manual de un caso de coordinación política entre gobiernos y administraciones distintas, la municipal y la regional, para atestar un castigo ciudadano tras una movilización modélica que no ha encontrado voluntad política alguna para conseguir un logro cívico en la línea que se respira en otras latitudes de ciudades abiertas, amables, saludables, sin contaminación, que niega un Gobierno democráticamente asentado en el poder durante treinta años en esta capital de Comunidad Autónoma, que hace gala de ser la séptima ciudad de esta piel de toro en la que habitamos.

¿Hasta cuándo, Sr. Ballesta? No pasemos página de esta manera, por el bien de la ciudadanía y por la propia memoria del Gobierno democráticamente elegido que usted preside. Aunque tan sólo fuera por el mandato constitucional que, en su art. 44, contempla, por una parte, el derecho a la cultura, y, por otra, las obligaciones de los poderes públicos de promover y tutelar su acceso a todas las personas. En este contexto, los poderes públicos llevan el apellido Ballesta y el derecho de «todos» lleva la connotación superlativa de las personas con movilidad reducida, que se verán repercutidas de lleno por la decisión de su equipo de Gobierno.

A tiempo estamos si aún alumbrara una mínima llama de voluntad política de oír el eco de una demanda ciudadana bienintencionada e independiente de ideologías políticas partidistas. De lo contrario, podríamos estar ante una concatenación represora entre administraciones, con premeditación y alevosía.

La plataforma Cine Rex Vivo sigue mientras cuente con el apoyo ciudadano que hasta hoy mantiene. ¡Gracias, Murcia!

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