Revalorización de las pensiones en la Constitución

No entro, Fernando, en el manido debate sobre el decaído y resucitado Real Decreto «ómnibus», que incluía, entre otras cosas, la revalorización de las pensiones conforme al IPC. Sin embargo, la tajante aseveración de tu portavoz en la Asamblea regional afirmando en su artículo de esta semana que «si hay un partido que garantiza y garantizará siempre las pensiones y su futuro, es el PP», para añadir a continuación que «siempre hemos apoyado la revalorización de las pensiones», sobrepasa cualquier límite de la ética política.

En primer lugar, conviene recordar que la ley 23/2013, impulsada por Rajoy, reguladora del Factor de Sostenibilidad y del Índice de Revalorización del Sistema de Pensiones, introdujo una nueva fórmula de revalorización (el factor de sostenibilidad) que, en la práctica, congeló las pensiones con incrementos del 0,25%, rompiendo con la vinculación al IPC que habían mantenido todos los Gobiernos desde 1985, salvo Zapatero en 2010.

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En segundo lugar, fueron los acuerdos que sustentaron la moción de censura contra Rajoy los que permitieron recuperar de nuevo la revalorización conforme al IPC, hasta hoy. Cuando esta medida se consolidó en una norma con rango de ley (Ley 20/2021), el PP votó en contra, argumentando que dicha ley no garantizaba la sostenibilidad del sistema al derogar el factor de sostenibilidad y que, además, implicaba una subida impositiva. Tampoco la patronal apoyó la ley en la mesa de diálogo social, aduciendo que conllevaría pérdida de competitividad, elevación de costes laborales y el recurrente impacto negativo en el empleo.

Sin embargo, nada de eso ha ocurrido. El Mecanismo de Equidad Intergeneracional (MEI), fórmula que sustituyó al factor de sostenibilidad, se ha mostrado eficaz, permitiendo no solo una actualización de las pensiones conforme al IPC, incluso en momentos de fuerte crisis inflacionista como en 2023, sino que, además, ha seguido incrementando el fondo de reserva, que cerró 2024 con 9.376 millones de euros. ¿Impacto negativo en el empleo? Sin comentarios.

Y es que hablamos de dos modelos diferentes e incompatibles: un sistema público de pensiones fuerte que garantice pensiones dignas y se sostenga con fórmulas como el MEI, reforzado con medidas fiscales redistributivas, o un sistema público de pensiones cada vez más devaluado que favorece el desarrollo del sistema de pensiones privadas.

Pero, para despejar dudas, Fernando, el tema se zanja incluyendo la revalorización de las pensiones conforme al IPC en el artículo 50 de la Constitución Española. ¿Qué opinas? 

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