Opinión | Con la venia

El derecho al honor de la hija de Anabel Pantoja

¿Pueden salir imágenes de un bebé en redes sociales o en medios de comunicación? ¿Puede salir su nombre o sus datos médicos?

Anabel Pantoja, en una imagen de archivo.

Anabel Pantoja, en una imagen de archivo. / Josefina Blanco / Europa Press

La prensa rosa lleva unos días haciendo un seguimiento exhaustivo sobre el estado de salud de Alma, la hija de Anabel Pantoja, una niña de apenas dos meses de vida que permanece ingresada en un hospital de Canarias. Periodistas, cámaras y fotógrafos esperan en la puerta del centro, de la vivienda de los padres de la pequeña, a fin de lograr una instantánea o a poder dar una exclusiva sobre su estado de salud o motivo de ingreso hospitalario.

Y esto me ha dado que pensar, pues, sobre los límites que separan el derecho a la información y el derecho a la intimidad de, en este caso, una menor.

¿Pueden salir imágenes de un bebé en redes sociales o en medios de comunicación, puede salir su nombre o sus datos médicos? La Constitución dice que no, que se necesita un consentimiento expreso de padres o tutores para ello.

En determinadas circunstancias, y llevamos años viéndolo en revistas, los padres pueden autorizar la publicación en televisión de imágenes del menor o de su nombre, siempre y cuando no le sea perjudicial.

Si se considera que el menor, ya adolescente, tiene cierta madurez, el Código Civil determina que muchas decisiones son suyas, no dependen de sus padres. Aunque no es el caso de la pequeña Pantoja.

En el caso de que unos padres o tutores hiciesen un uso de la imagen de un menor que perjudicase a este, la Fiscalía podría llegar a actuar, en nombre del niño afectado, e iniciar acciones legales contra los padres y contra los medios que se hayan prestado a ello. Hace años, el Defensor del Menor ya dio un toque a Belén Esteban, que por aquel entonces hablaba en televisión y revistas de las circunstancias de su hija (ya no lo hace, ahora es una joven alejada del foco mediático).

¿Puedo facilitar los datos médicos de mi hija o puede el hospital facilitarlos a los medios de comunicación? Rotundamente no. Esto también queda regulado en la normativa que vela por la protección de datos de carácter personal tanto de adultos como de menores.

En definitiva, la intimidad e imagen de una persona que no ha cumplido los 18 se encuentran blindadas y, si se vulneran, se podría llegar a una demanda de daños y perjuicios por intromisión del derecho al honor e imagen de la persona y a que la propia Agencia Estatal de Protección de Datos sancione. En supuestos muy graves, la Fiscalía podría pedir que a los padres se les retire la guarda y custodia.

Volviendo al caso de la pequeña Pantoja, aunque la madre acostumbre al público con narraciones sobre su vida privada, en este caso deberá hacerlo (y lo está haciendo, no ha expuesto a su hija) con especial cautela. Solo pedir que la pequeña se mejore y se obre ese milagro del que empieza a hablarse.

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