Tribuna libre

Oiga, esto es Urgencias

Carlos Contreras García

En los últimos tiempos los gestores del Servicio Murciano de Salud (SMS) están intentando trasladar a los Servicios de Urgencias (SU) tareas administrativas que nunca han estado en su cartera de servicios, llegando a plantear incluso que dichos servicios hagan las bajas laborales de los pacientes que atienden. Esto va a generar problemas graves a los pacientes, a los profesionales y al sistema sanitario.

Los SU desarrollan una actividad eminentemente asistencial y no programada. Son estructuras diseñadas para la identificación, diagnóstico, observación y tratamiento de patologías graves tiempodependientes con la mayor celeridad posible, en las que todo el proceso asistencial debe garantizar dicha premisa como eje vertebrador de la propia actividad asistencial. La realización de labores administrativas demorables entra en claro conflicto con su idiosincrasia y su función dentro del sistema sanitario.

Los médicos de los SU realizan múltiples actividades clínicas y asistenciales simultáneas, todo ello en un clima de incremento exponencial de la presión asistencial que vienen soportando desde hace años. Si a los profesionales que trabajan en estas áreas se les inunda de labores administrativas demorables, su capacidad para desarrollar su actividad clínica se verá mermada, teniendo un gran impacto en la calidad asistencial y la seguridad del paciente. Me parece imposible justificar el hecho de retrasar la atención a un paciente con una emergencia médica por estar haciendo tareas administrativas demorables y esa situación no sería entendible por nadie, ni por los profesionales ni por la población en general.

Habrá que buscar otras fórmulas ajenas a los SU para que ello no suponga una demora en la atención a pacientes urgencias y emergencias médicas, que es, y debe seguir siendo, la prioridad de esos servicios. Es absurdo pretender que todos los médicos hagan lo mismo cuando desempeñan tareas completamente distintas.

Desburocratizar es uno de los motivos que argumentan los directivos del SMS para justificar esta deriva, pero desburocratizar no es pasar la burocracia de un nivel asistencial a otro. Hoy en día hay recursos técnicos de sobra que se podrían implementar para aliviar muchas tareas burocráticas. Creo que es posible hacer una mejor gestión de este problema que, tal como se está manejando por parte del SMS, sólo va a traspasar los problemas de un nivel asistencial a otro y está provocando ya tensiones innecesarias entre profesionales de los distintos niveles asistenciales.

En mi opinión, se trata de un caramelo envenenado que los gestores del SMS quieren regalar a Atención Primaria a costa de los SU, que no va a resolver ningún problema en ese nivel asistencial y que va a crear muchos en los SU, en los que la inmensa mayoría de facultativos son especialistas en Medicina Familiar y Comunitaria y creen en la Atención Primaria, pues saben que es la base del sistema sanitario, donde se resuelven la mayoría de problemas de salud de la población con gran eficiencia.

Es evidente que la Atención Primaria está infradotada y colapsada hasta el punto de casi no poder hacer su función porque no tiene, entre otras cosas, la accesibilidad mínima exigible para ello. Una demora de diez días o incluso dos semanas desde que pides cita con tu médico de familia es un absoluto contrasentido que impide ejercer su función. Los SU son los primeros interesados en un buen funcionamiento de la Atención Primaria, sufren a diario las consecuencias de su colapso.

Esta falsa solución que propone el SMS es, también, una cortina de humo para no atajar de raíz el gran colapso de ese nivel asistencial. Además, con esta medida, que resta competencias a la Atención Primaria, se va a producir un mayor alejamiento y desafección de la población respecto al Centro de Salud.

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