La Opinión de Murcia

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Enrique Nieto

Pintando al fresco

Enrique Nieto

Principio de curso

Enrique Nieto. L.O.

Juan y Paqui tienen dos hijos y una hija, de 2 y 11 años los niños, y de 16 la mayor (sí, el de los 2 años fue un imprevisto). Estos días andan bastante liados con el principio de curso. Hay que prepararles a los nenes todo lo que necesitan para el cole y eso no es moco de pavo. Para el pequeño no han encontrado plaza en la pública y han tenido que llevarlo a una guardería monísima, con jardín (bueno, es un patio con unas macetas, pero la directora lo llama ‘el jardín de juegos’), donde la enseñanza es bilingüe, inglés – español, y se dirigen a los nenes y a las nenas indistintamente en los dos idiomas, es decir, que, cuando le están dando la comida, cuyos menús han sido programados por un dietista sueco carísimo, lo mismo le dicen ‘abre la boca’ que open your mouth, lo cual ayuda mucho en la formación del crío, que se llama Pepe, pero en la guardería, al ser bilingüe, lo van a llamar Joe. La bisabuela paterna ha dicho que por qué van a llamar al nene ‘Joer’, porque está un poco sorda y no le va muy bien la pronunciación inglesa, al tener 89 años. Por supuesto, disponen de comedor y de un horario adaptado a las necesidades de los padres, mediante pago, claro, la cama aparte. Pueden dejar a los nenes desde las 7 de la mañana y recogerlos cuando les venga bien. Los de la guardería han pensado en todo, y, aunque les cuesta un dineral, van a llevarlo allí, porque la hermana de Paqui, que está casada con un empresario del transporte, dice que es «lo mejor de lo mejor». Juan, que es informático, opina que es mucho dinero para un crío tan pequeño, pero Paqui, que trabaja en la empresa de su cuñado, dice que lo del inglés está muy bien para el futuro, aunque a Juan le han dicho que todo el inglés que va a aprender el chiquillo en un curso completo lo aprendería en una semana cuando tenga unos cuantos años más.

El chico de 11 años, que en su casa le llaman Paco pero él le dice a todo el mundo que se llama Frank, comienza la ESO este año, y, como su curso es impar, tiene que empezar con la nueva ley de Educación, la Lomloe, que, por cierto, los profesores no han recibido todavía el currículo porque a la consejera parece que se le ha olvidado mandarlo, o no ha tenido tiempo para hacerlo, qué sé yo. El caso es que estos muchachos deben hacer una prueba de inicio para saber más o menos cómo llegan, pero los profesores no saben qué preguntarles, si una competencia, un dato concreto o la madre que va a parir a los que no hacen una ley que valga para treinta años. Al chico, lo único que le importa es que por fin sus padres han permitido que su abuela le regale un teléfono, que estaba loco por conseguir uno, porque todos sus compañeros lo tienen desde que hicieron la primera comunión, y a él no se lo permitían, y tenía que ver el porno en los teléfonos de los amigos. Los padres ya le han comprado el material, que les ha costado un dineral, pero es que el librero les ha dicho que el papel ha subido muchísimo por lo de la luz y el gas. También han tenido que comprarle ropa a Paquito, porque, al ser ya Frank, tiene que vestirse de otra manera, dice él.

La nena, Elenita, comienza 1º de Bachillerato –qué ilusión para los padres, en dos años, a la universidad -. La chica está muy pero que muy cabreada porque en el instituto la han puesto en un grupo en el que no está Julio Mari, su chico. Bueno, no es ‘su chico’, pero ella lo tenía todo preparado para conseguir que lo fuera. Se ha pasado el verano tomando el sol para ponerse morena de piel y rubia de pelo, porque a ella con el sol se le aclara el cabello. También se ha comprado un top que es como si hubiera tenido un accidente y debiera llevar una venda sobre los pechos. También tenía preparados unos shorts de escándalo, todos llenos de rotos y agujeros. Su padre le ha dicho que así no sale a la calle, pero ella, en caso de mantener la prohibición, se llevará el conjunto en el macuto y se cambiará en algún sitio antes de entrar al instituto. Su padre, que está con la ilusión universitaria, no sabe que ella quiere hacer una Formación Profesional para colocarse pronto como su amiga Dora, que hizo Estética y le va de cine.

Y así sucesivamente.

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