Desde la Plataforma en defensa del Transporte Público hubiésemos deseado, ya que el 3 de diciembre de 2019 no pudo ser, o no hubo intención de hacer, que, al menos, este 3 de diciembre fuera un día de cambios a mejor en el sistema de movilidad de la que está tan necesitada esta Región. Pero nos tenemos que no. Será un día de improvisaciones, de declaraciones, de quejas de los usuarios y, lo que es peor, de insultos para los conductores como únicos representantes físicos de las nuevas concesionarias-administraciones y de su falta de hacer bien su trabajo.

Señor Díez de Revenga, usted que por adelantado pidió disculpas anticipadas por las molestias que causarán los autobuses el 3 de diciembre le decimos que no. Disculpas no. Perdón. Pida usted perdón. Es lo justo.

El día 3 dígale usted a una vecina de Las Torres de Cotillas que es «el centro de toda la política de transporte», como usted dice, y a continuación dígale que un laborable tendrá, para ir a Murcia, siete autobuses en vez de los quince actuales. Dígale también que así, de la manera por usted propuesta, será más atractivo el nuevo sistema de transporte, pues se le ha diseñado un sistema por el cual verá el término municipal de Murcia, y, aunque no lo quiera, la llevaremos de paseo por las universidades de Murcia, y luego a Murcia para ir a trabajar. Y los sábados y festivos, aunque sea verano, la pasearemos por los campus cerrados por vacaciones. Dígale también que antes habían circulado muchos autobuses y por eso los sábados y festivos tendrá menos que hasta ahora, aunque sea para ir a Alguazas o Molina. Dígale que ha llegado la revolución, la del consejero, vamos.

Y a continuación, argumente usted que, pese a todo, ese concienzudo estudio ha decidido «mantener, como mínimo, el nivel de oferta actual, y mejorar en la medida de las necesidades reales de los ciudadanos».

Pero no solo en Las Torres.

Diga que, para Alguazas, el estudio ha determinado el desplazamiento habitual de los ciudadanos y ha dicho que la mayor demanda ha sido con Molina y por ello se ha considerado que, para esa demanda, no se podrá usar la línea MUR-003-1A y 1B que es la que vertebra el municipio y la que mayor número de expediciones tiene, 22 un día laborable. Por ello se ha determinado que deberá tomar el de la línea MUR-001-4 (desde Alcantarilla) que ofrece ocho expediciones, puesto que el tráfico entre Alguazas y Molina se le considera ‘prohibido’ a aquella concesión. Bueno, quizás se han dado cuenta de lo expuesto en los anteproyectos de las concesiones implicadas y se ha cambiado. Como no se ha dicho nada de las alegaciones presentadas, cabe esa posibilidad. Para qué informar a los que se han interesado de verdad cuando son mejores las declaraciones ampulosas y cínicas.

Si nos vamos a Santomera, estarán de enhorabuena porque vuelven a tener autobuses directos para la Universidad después de haberlos eliminados es misma consejería que ahora los da. ¿Pero para ir a Murcia? Para Murcia es otra cosa, que todo no van a ser buenas noticias.

Santomera, con la línea LAT-36 un laborable (siempre hablamos de un día laborable de invierno) tiene 22 expediciones a Murcia. Ahora tendrá, sumando las MUR-002-3A y 3B, pasmasen ustedes, diez expediciones. Y que conste que en los diez anteproyectos de dice el mantra de «mantener, como mínimo, el nivel de oferta actual».

Pero la consejería lo tiene todo pensado, y las dos líneas de las universidades, cinco expediciones, después de dejar a los estudiantes les llevará a Murcia. Eso sí, el viaje ‘normal’ tiene unos 15 kilómetros y por las universidades casi el doble (consúltese el anteproyecto, páginas 13 y 14). Y también tendrá que pagar más por ser este viaje superior a 20 kilómetros.

En honor a la verdad. En esta concesión, se les da un servicio que nunca han tenido a La Gineta (Fortuna) o a Matanzas (Santomera) además de unir Beniel con Santomera.

Pero como la alegría dura poco en casa del pobre, El Raiguero-La Villa (Beniel) se queda sin autobús porque el servicio de la línea 30 termina donde el término de Murcia. Eso sí, se recalca (y no es broma), que «para garantizar la movilidad de los habitantes de esta población se ponen a disposición las plazas restantes no utilizadas del transporte público escolar. Así, se garantiza un servicio de transporte con el que los habitantes de esta localidad podrán beneficiarse». ¿Cada cuánto tiempo pasa ese autobús escolar? ¿Sábados y festivos?

Explique usted, señor consejero a ese usuario que recargó un bono de LAT, el pasado día 16, y el 31 de diciembre ya no le valdrá, cuando LAT hasta el 24 lo estuvo recargando/vendiendo cuando la caducidad es de un año. Debieron dar el aviso oportuno, pues estaban pensando si había algún adjetivo superlativo para el nuevo plan de Movilidad Cotidiana.

Eso sí, me inclino ante ustedes porque saben hacer de un fracaso una virtud. Ahora resulta que este periodo de dos años es para analizar los resultados de cada línea para introducir mejoras que permitan adaptar «el transporte de viajeros a las necesidades reales de desplazamiento y se volverán a sacar a licitación las concesiones por un plazo de diez años». ¿Me he perdido algo? ¿Dónde aparece que hay que poner una concesión transitoria antes de la definitiva? ¿No será que ha sido la manera chapucera de tapar el fracaso? ¿No han tenido tiempo de hacer su trabajo?