Todos somos conscientes del impacto que la crisis del Covid está teniendo en términos sanitarios, sociales y económicos en la Región, de manera muy especial en los más vulnerables y, parafraseando a Álex Grijelmo, también los vulnerados. Desde la declaración del Estado de Alarma el pasado mes de marzo se ha abierto paso una hibernación social y económica que está desencadenando una situación de emergencia social inédita y con unas dimensiones muy amplias.

La señal más directa y grave se está viendo reflejada sobre la renta de las familias. Las consecuencias recaen sobre la población más vulnerable y suponen un importante incremento de las desigualdades. El temporal de frío sobrevenido estas últimas semanas ha incrementado la desprotección de hogares y familias que no pueden cubrir ni tan siquiera necesidades básicas como son la electricidad, la luz o el agua, también en la Región de Murcia.

La subida en la factura eléctrica acentúa esta realidad que el Plan de Reforma del Sistema Eléctrico ideado por Podemos para pagar menos por la factura de la luz no vendrá a solucionar, dado que ha quedado en papel mojado. La bajada del 10% en el IVA de suministros básicos para los consumidores vulnerables que promovieron en su momento, no ha sido aprobada ni tiene visos de serlo, porque tampoco se espera una acción contundente por parte de Pedro Sánchez que permita ninguna mejora.

Según los datos del último estudio de la EAPN, anteriores a la pandemia, en la Región de Murcia los hogares que sufren pobreza energética representan el 15,14% del total. Familias vulnerables cuyo gasto energético ha superado el 10% de sus ingresos. Desde la consejería de Mujer, Igualdad, LGTBI, Familias y Política Social destinamos el año pasado un millón de euros para el desarrollo en todos los municipios de la Región de actuaciones destinadas a luchar contra la pobreza energética, llegando a más de 3.000 familias.

Hablamos de una línea de ayudas directa orientada al pago de suministros básicos tales como electricidad, gas o agua, y a mejorar la eficiencia energética y el ahorro en el consumo de estos suministros mediante la financiación, por ejemplo, para adquirir electrodomésticos más eficientes o para aprender hábitos que pueden ahorrar en el consumo energético.

Todo ello a través de proyectos que son promovidos y ejecutados desde la Atención Primaria de los Servicios Sociales, para los que se han destinado en 2020 más de doce millones de euros del Presupuesto Regional, precisamente pensando en el desarrollo de actuaciones enfocadas a la lucha contra la pobreza a través de las entidades locales, que realizan una valiosísima labor.

La Región de Murcia es una de las Comunidades autónomas de España que mayor porcentaje de los fondos sociales Covid recibidos en abril destinó a la Atención Primaria, a través de los Ayuntamientos, para que las áreas de Servicios Sociales de los mismos pudieran cubrir las necesidades básicas de la población más vulnerable durante los primeros meses de la pandemia.

Más de seis millones de euros destinados a la contratación de personal de trabajadores sociales en los Ayuntamientos; financiación de servicios de primera necesidad para afrontar medidas de apoyo domiciliario; y atención especial a familias monoparentales y familias numerosas de categoría especial.

Respondimos rápido y fuimos ejemplares, lo que nos mereció la felicitación del Gobierno central. Distribuimos entre los Ayuntamientos en base a los proyectos que nos presentaron, y además tuvimos en cuenta en los criterios de reparto la edad de la población, pero también la compensación a las pequeñas localidades, donde llegar con el apoyo social resulta más costoso.

Seguimos trabajando. Queremos erradicar las desigualdades en el menor tiempo posible, tal y como nos comprometimos en el Segundo Pacto Regional de Lucha contra la Pobreza y la Exclusión Social atendiendo el mandato de los Objetivos de Desarrollo Sostenible. Sabemos que nos encontramos en momentos difíciles, por eso nuestro esfuerzo será aún mayor a la hora de lograrlo, porque somos conscientes de que muchas personas están aún más abocadas a ella y debemos seguir aunando objetivos e impulsando medidas para evitarlo a través de la Mesa de Lucha contra la Pobreza y Exclusión Social creada en 2019.

La tasa Arope publicada a finales del pasado año indica que casi un tercio de la población de Murcia se encuentra en situación de riesgo o exclusión social. Una tasa que durante los últimos cinco años se ha ido reduciendo, rebajando incluso un 34% la tasa de pobreza severa, lo que nos sitúa en una posición intermedia con respecto al resto de comunidades autónomas en este ámbito, prácticamente en la media nacional. Más que como un logro, debemos hablar de ello como un referente a tener en cuenta que nos indica que vamos por el buen camino.

Sabemos que no estamos solos y que contamos con una red de entidades locales y organizaciones del Tercer Sector dedicadas a quienes más lo necesitan. Por eso aprovecho esta tribuna para agradecer a todas la importantísima labor que desarrollan a diario. Tenemos mucho que aprender de su experiencia y del saber hacer de sus profesionales, que ha permitido que muchas familias hayan sentido el calor de un hogar o la posibilidad de mejorar su vida, con especial dedicación durante los últimos meses.