Yo he buscado toda mi vida estar confinado pero no he podido», dice en una entrevista el poeta Joan Margarit, Premio Cervantes en 2019. Tenía escrito algo así pero en largo, complicado y menos personal, y lo aparco. Leo ayer, también, otra frase rara, esta en titular, a propósito de la nueva cepa: «Bendita mutación». Un epidemiólogo celebra así que la nueva vuelta de tuerca del Covid-19 nos haga tomar el asunto más en serio estas Navidades. El virus se defiende, entiende la vida como expansión indefinida, se resiste a que lo confinemos en un reservorio (eso hacemos con él al confinarnos); o tal vez sepa, por la memoria de la gran familia vírica, que antes o después daremos con el modo de quitarlo de la circulación. Conforme sabemos más del virus sabemos más de nosotros, la cepa SAPIENS. A fin de cuentas somos de la misma familia, llamada VIDA, y tenemos un cerebro común.