Prever la victoria cuando cualquiera la puede conocer no constituye verdadera destreza. Siempre vi el 'milagro murciano' con lo ocurrido entre el 8 y el 14 de marzo. El distanciamiento y alejar de los centros sanitarios a las personas y perseguir la cadena de contagio (institucional y social), y algunas decisiones políticas ha tenido su efecto en la curva de Murcia (es la más coreana de España). La tasa de infección ha sido de las más bajas de España. La primera ola ha sido suave, ni exponencial, y tendrá una resaca constante y tediosa durante todo el confinamiento.

Las medidas puestas en marcha han sido y son efectivas, pero desde hace unos ocho días se devalúan a medida que se difumina la red de contagio. Se expande la epidemia y crece el número de asintomáticos o paucisintomáticos. El virus ha superado todas las fronteras humanas para seguirle de forma convencional. Estimamos que actualmente están siguiendo telefónicamente al 20% de los infectados. Y cada día que pasa a un porcentaje menor.

Dentro del intervalo de estimaciones reportadas, a esas alturas están infectados alrededor del 3,7% (55.500 infectados, y 83.250/111.000 contactos) de la población de la Comunidad autónoma. En Madrid las estimaciones conservadoras son del 15-20% de la población a fecha de principios de abril (1,3 millones de madrileños). Algunas estimaciones, ya por encima de los 2,6 millones. En base a las series islandesas, países asiáticos y experiencias italianas, el 60% de los infectados son asintomáticos y paucisintomáticos.

La evolución de la situación en Madrid va a influir mucho en el futuro de la pandemia del Covid en la Región de Murcia; si el efecto rebaño se consigue en Madrid en 2-3 semanas (probabilidad media alta), las medidas de confinamiento se irán relajando en toda España. Y el riesgo de rebote en la Región de Murcia con una segunda ola poderosa tras relajar el confinamiento será elevado para incrementar la tasa de contagio.

Las altas temperaturas de la región, climas áridos y tropicales parecen desfavorecer la propagación. Es incierto y nos faltan modelos de la extensión de la epidemia en el África subsahariana y América latina, pero se espera que la climatología pueda ir a nuestro favor.

Hemos llegado prácticamente hasta aquí con la armadura al límite, sin pruebas (suficientes y masivas) y con las tareas realizadas. Desde hace casi una semana estamos en una nueva etapa: las olas y su resaca.

Las propuestas en esta nueva etapa pasan por:

1. Los test masivos (importante para proteger la armadura del sistema sanitario). Incluso hacerlos más allá de los centros sanitarios, en la comunidad. Anexar un QR a cada individuo con el resultado y fecha en su tarjeta sanitaria.

2. Tejer la red social de Covid-Murcia. Más allá de la labor de los profesionales necesitamos implicar a la sociedad en la cadena de contagio (el embrión es el llamaleydile). Ciudadanos activos.

3. Continuar con la llamadas telefónicas de Atención Primaria. Integrar la cita previa con la prueba de test masivos y la red social ciudadana. Es necesario mejorar la eficiencia del trabajo. La epidemia está ya mucho más allá de las fronteras de CitaPrevia.

4. Des-pa-ci-to. Cuanto más dure el confinamiento mejor para Murcia. La baja tasa infectiva conseguida en esta primera onda u ola, da una sensación de resaca con un goteo de casos hasta el final del confinamiento. El riesgo del efecto rebaño en Madrid, hará que al relajarse las medidas de alarma en toda España se incremente el riesgo de una segunda importante en Murcia. Por eso se debería extremar incluso más que en otras Comunidades que han tenido una tasa de ataque mayor.

5. El Covid es el turbo del nuevo modelo. Aprovechar los logros introducidos en el nuevo modelo sanitario basados en la visión de #HeroDoctor (presencial a distancia y eficiencia, la salud es del ciudadano), en el que lo importante es la participación de los individuos y comunidades. Esta crisis ha puesto de manifiesto que no faltan 'profesionales asistenciales' sino 'asesores de salud a distancia'. La eficiencia y productividad ha aumentado. El coronavirus es el turbo para el modelo económico y social.

6. Un nuevo modelo de cuidados para nuestros mayores emerge. La vejez es cronicidad y la cronicidad es salud, recuperar esta competencia de algo que nunca debimos perder ayudará a vertebrar ese nuevo modelo. ¿Se acabó el negocio? No, surgirán nuevos modelos más ecosistémicos.

7. Previsible tensión entre Salud, Economía y Bienestar Emocional de las murcianos/as a partir de las próximas tres semanas. Esto generará tensiones entre las propias Admnistraciones, consejerías y sectores económicos de la región. Los profesionales requerirán nuevos estímulos.

8. Ir pensando en el día después. Especialmente los niños/as porque lo que hagan ese día no lo olvidarán nunca. Lo que el #DíaDespués hagan los niños/as, les acompañará toda su vida. Ese día es clave para disminuir la #BrechaNatural, y tendrá un efecto duradero y permanente en sus vidas y en el planeta.

Este será otro capítulo.