NAos cantaba Sabina que le costó olvidar a su amor diecinueve días y quinientas noches. Nosotros, ciudadanos de a pie, llevamos ya más de diecinueve días enclaustrados intentando superar 'la desazón'. El temor se lo dejamos a los grandes privilegiados, los que tienen más que perder.

La desazón nace cuando eres consciente de que estás en manos del destino, cuando sabes que una vez utilizados tus resortes y habilidades, el resto es una pura cuestión de azar; te contagias o no, Dios sabrá por qué, pierdes tu trabajo o no, etc.

El pueblo español, con su ancestral sabiduría, sabe que no puede esperar nada ni de políticos ni de recetas milagrosas. Escucha sus bonitos discursos, cuasi homilías, porque supone que le van a dar pistas para cuando deba tomar sus decisiones más críticas, pero no espera soluciones.

Este es el punto en que nace la auténtica solidaridad entre iguales. No es ni siquiera un sentimiento altruista, es un mecanismo de defensa colectivo. Una especie de adrenalina intelectual muy útil para la supervivencia de la especie. Quien ha vivido una catástrofe o ha hecho la mili en tiempos duros sabe a qué me refiero. A pesar de todo es alentador que este bello sentimiento puede surgir en cualquier momento importante como el presente. Es alentador porque es garantía de victoria. El pueblo ya ha vivido su vigésimo día de encierro, y vendrán el 25, el 50? y vencerá.

Mientras tanto, existe una casta que tendrá que superar las quinientas noches o más; si no me salen mal las cuentas de Sabina, por cada mal día que pasemos los mortales ellos tendrán que superar veinticinco noches, y ya sabemos que las noches son más duras.

Ya les estoy empezando a ver las caras de miedo, y no es para menos. Produce auténtico estupor verlos jugar con una adolescente caradura al 'monopoli político'. Esos personajillos horteras que se presentan como El Líder de su formación deberán aprender que ese estatus no puede uno autoadjudicárselo sin rubor. Debe ser el grupo quien te lo conceda. Para eso no vale la compra de votos.

Quinientas noches van a ser una prueba de algodón muy larga para estos líderes de cartón piedra.