Atrás quedaron las buenas intenciones, los deseos de paz y amor, el espíritu navideño y los polvorones. Welcome to the jungle como cantaba Guns N’Roses, es tiempo de afilar los cuchillos y prepararnos para la batalla. Sólo en la primera semana de vuelta a la rutina, Murcia se convierte en foco de actualidad mediática y política, no precisamente por algo bueno.

Vaya por delante que no soy madre, y seguro que más de uno dirá que no estoy preparada para hablar de según que temas, pero como se podrán imaginar, me preocupa más bien poco o nada lo que piensen, así que hablemos del pin parental, ese gran desconocido en nuestras vidas hasta hace escasos días en los que la educación se convierte en la primera moneda de cambio para la aprobación de los presupuestos regionales.

¿Todo vale con tal de gobernar? Sin duda, y Murcia es el gran ejemplo de ello. El Partido Popular de la Región se arrodilla ante Vox (es curioso cómo agachan la cabeza ante quienes les están destruyendo como partido y esto es sólo el principio). El presidente de la Comunidad daba una rueda de prensa el pasado viernes satisfecho por el acuerdo para la aprobación de los presupuestos y felicitándose como ejemplo de entendimiento. Querido Fernando, esto no es entendimiento, esto es cumplir la voluntad del partido que te ha dado la llave para gobernar y acceder a todo lo que quieran a costa de los murcianos, y Ciudadanos de comparsa de semejante esperpento. Qué pena.

Una de las cosas que más me fascina de las generaciones que vienen es su tolerancia y normalización que los de generaciones pasadas no hemos disfrutado. Pero son los padres de estas generaciones, los de mi quinta, los que no han superado muchos prejuicios y quieren de este modo coartar las libertades de sus hijos con sus propias frustraciones. Les recomiendo que recen o se aprieten el cilicio y dejen a sus hijos en paz, seguro que tienen una mentalidad mucho más sana que la suya. No impidan que sus hijos sean mejor que ustedes y crezcan en tolerancia, libertad y respeto. Como sus mentes son sórdidas y retorcidas qué pensaran que son esas actividades complementarias, más allá que educar…

Decía el presidente (en la rueda de prensa que le da vía libre a los presupuestos), «gracias, porque son los presupuestos de todos los murcianos». «Voten a quien voten, piensen como piensen, recen a quien recen o amen a quien amen». Querido presidente, sus tragaderas son infinitas y todos sabemos que a los señores de verde sí le importa a quién recemos o amemos, y por eso pretenden que sus hijos quieran, recen y amen a quien ellos y Dios quieran.

¿Se acuerdan de la Princesa Prometida? El fiel escudero siempre cumplía los deseos de la princesa con la frase «como desees», y esto es exactamente lo que hace el PP con Vox, estar a su merced y quitarse poco a poco la careta y sentirse más cómodos con el pin parental, potenciar el valor de la caza, cerrar un centro de menores no acompañados, combatir el aborto…

Para los que hemos estado ahí, como Borja Semper, y hemos vivido otro Partido Popular, es descorazonador en lo que se ha convertido y sobre todo a qué precio. Entiendo que Semper no se sienta cómodo y el pasado lunes decidiera dar un paso valiente y dejar el PP, aunque espero verle pronto de nuevo en política, ya que su compromiso, sentido común y voluntad de trabajar por los ciudadanos es todo lo que quiero en un político y es lo que debería de ser la regeneración de la política de este país, pero no.

Son los políticos más sensatos y válidos los que nos están abandonando, Borja seguía la estela de Eduardo Madina, otra gran pérdida de una generación que debería liderar nuestro país y no abandonar sin fuerzas para continuar ante la deriva ideológica y política.

Y entre tanto pin pam pum, me pregunto donde está el PSOE de la Región de Murcia, ojo que no es la primera vez que me lo pregunto. La puesta en escena está muy bien y la rueda de prensa del otro día en la que de manera responsable aprobarían los presupuestos con condiciones está muy bien, pero no dejaba de ser un paripé más. El acuerdo de la vergüenza estaba a falta de firma, y Diego Conesa no sé muy bien dónde está ni a qué se dedica. Necesitamos una oposición fuerte que no permita que seamos el conejillo de indias de políticas de extrema derecha. Por favor, sean responsables y actúen por el bien de la ciudadanía que hasta donde recuerdo ganaron las elecciones regionales siendo la lista más votada. La calle no quiere lo que está pasando, hagan algo y dejen de perder el tiempo.

Y mientras, en el mundo cítrico murciano las cosas están como en la película de Los Inmortales: «Solo puede quedar una». Es un secreto a voces que no se soportan desde el minuto uno, es una evidencia que la consejera de Igualdad estaba y está en inferioridad de fuerzas, apoyos y simpatías. No sé cuánto durará el pulso, pero lo que está claro es que lejos de estar ‘centrados’, nunca mejor dicho, en gobernar están disputando un pulso que deja en muy mal lugar a este partido que se contradice a cada paso que da y no se siente nada cómodo con sus amistades peligrosas.

Metan todo esto en una coctelera, a la que le pueden añadir a Puigdemont, la ‘separación de poderes’ y los nombramientos de los ministros; agiten y tómense un chupito porque esto acaba de empezar.

Y recuerden si piensan como yo: cada vez que salgan de casa comprueben que llevan móvil, llaves, cartera, hoz y martillo.