La creación de un recinto ferial en Corvera, al amparo del aeropuerto que hoy se inaugura, es una ocurrencia desechable. Esta Región cuenta desde hace muchos años con una infraestructura de esas características en la localidad de Torre Pacheco, a apenas quince minutos de la pedanía murciana. Lo que correspondería hacer en buena lógica sería potenciar Ifepa desde el Gobierno regional y, en todo caso, facilitar algún tipo de comunicación directa desde Corvera a Torre Pacheco para las ocasiones en que se celebren exposiciones que puedan atraer viajeros aeroportuarios.

Esta Región sufre de un gran déficit de infraestructuras de todo tipo, y es un error duplicar las existentes antes que impulsar otros proyectos relacionados con aquellas de las que carece. El error es más grave si lo que se pretende es recentralizar en el territorio de la capital murciana aquellas iniciativas que, con gran esfuerzo, han puesto ya en marcha otros municipios. Si ya está ahí Ifepa ¿qué necesidad hay de crear otro recinto ferial para competir con ella cuando lo que correspondería es ayudarla y buscar otras alternativas de desarrollo para Corvera?

La fuerza centrípeta de la capital de la Región debe modularse, a no ser que pretendamos vivir en una Comunidad demediada. Corresponde valorar y alentar los proyectos locales que han supuesto apuestas arriesgadas, como el caso de Ifepa, en vez de boicotearlas desde el gran potencial económico de la capital.

No sorprende que el alcalde de Murcia, José Ballesta, quiera lo mejor para su ciudad, pero el partido al que pertenece debiera tener en cuenta que las inversiones estratégicas han de programarse en un esquema planificado. Ballesta fue consejero de Industria y Empresa antes que alcalde, e Ifepa estaba incluida entre sus competencias, una experiencia que le debería llevar a valorar que no hay progreso si unos municipios compiten con sus vecinos con proyectos idénticos antes que alternativos o complementarios.

Por lo demás, Torre Pacheco está a un paso de la terminal del nuevo aeropuerto, y sería una actitud ventajista atajar las posibilidades que se abren para ella creándole competencia con apoyo institucional, cuando éste debiera volcarse, digo, en ampliar el potencial de Torre Pacheco. ¿Tiene sentido desnudar a un santo para vestir a otro cuando quedan tantos santos por vestir? Ya se ha hecho trasladando San Javier a Corvera con alto coste y sin garantía de que el beneficio real lo compense, por mucho que la literatura propagandística abunde en un brillantísimo futuro.

La incompetencia gubernamental no ha conseguido siquiera poner en marcha una actividad regular de pequeños eventos en el Auditorio Regional de Murcia o en el Batel de Cartagena, ¿y pretenden que la Región sea referencia mediterránea de grandes ferias? Si así fuera, que apoyen Torre Pacheco. No todo tiene que ocurrir en Murcia capital.