Entre las nubes altas, se denominan ´cirrus uncinus´ a los que tienen forma de gancho. Mirando desde la ventana de la cocina, una abigarrada masa de uncinus estaba casi sobre mi cabeza, mientras que más abajo, algo por encima de la altura de la vista, el cielo azul aparecía cruzado por las combas paralelas de varias estelas de reactor, en distinto grado de aflojamiento de su tensión interior.

¿Qué es lo que hizo que, mientras trataba de comprender este espacio, irrumpiera en él desde arriba otro reactor perpendicular a las combas, y lo advirtiera yo justo cuando empezaba a hacer la secante a la primera?

La interpretación de las nubes, o del vuelo de los pájaros, es un acto de soberbia, pues, aunque dependen de la posición del intérprete, contarían cosas válidas para todos. En la comedia de Aristófanes (Las nubes), sin embargo, hablan sólo de cuitas del observador.