María González Veracruz fue presentada en la antesala de las últimas elecciones generales como ´ministra en la sombra´ de Pedro Sánchez, con cartera de Ciencia incorporada, junto a un buen número de notables, algunos de los cuales vuelven a sonar para el inmediato Gobierno que formará el ya presidente. Pero la murciana cayó en desgracia por su posición durante las primarias a la secretaría general del PSOE, en las que se decidió por Patxi López (ministrable ahora, curiosamente) antes de que Sánchez anunciara su decisión de concurrir. La relación entre Sánchez y Veracruz, que era muy estrecha, se hizo añicos por esa causa, hasta el punto de que en las primarias murcianas para el liderazgo territorial, el hombre de mayor confianza de Sánchez en su ejecutiva, Ábalos, interfirió en la segunda vuelta, rompiendo la neutralidad de Ferraz ante el temor de que la candidata pudiera ganar, y es obvio que Sánchez no podía ser ajeno a esa operación. Por tanto, a pesar de las escenas de cordialidad que se produjeron tras el triunfo de la moción, el pasado viernes, Veracruz parece haber perdido la condición de ministrable con que arrancó la última campaña electoral.