Los murcianos se han acostumbrado a anuncios de obras y proyectos que no salieron como estaba previsto». Así lo afirmaba David Gómez en este periódico el domingo, 6 de agosto, con el vergonzante balance de 12 obras públicas que, financiadas con el dinero de todos, no vieron la luz o no la vieron como fueron proyectadas.

El proyecto de soterramiento convenido en 2006 podría ser el nuevo peldaño de esta escalera de fracasos o grandes pifias de la Región, para vergüenza de Murcia, sin que ninguno de los responsables haya pagado por tales desvaríos.

La llegada del AVE a la estación del Carmen, que nos proponen los tres gobiernos: Nacional, regional y municipal, en superficie y sin soterramiento, podría ser la última excusa para una nueva pifia que añadir a las doce que este periódico denunciaba: el no soterramiento de las vías en Murcia.

Porque si logran el desatino de la llegada del AVE en superficie a la estación del Carmen, se estará consumando el retraso sine die de aquel proyecto que iba a ser «la revolución urbanística más importante de los últimos cien años», como nos vendieron aquellos visionarios de quimeras, cuyo objetivo último era la especulación y la corrupción.

La vía en superficie, que en estos momentos se está construyendo paralela al trazado ferroviario entre Los Dolores y El Carmen, tiene como único objetivo técnico la liberación de los terrenos sobre los que se ha de ejecutar la obra del soterramiento e impedir cortes de las circulaciones ferroviarias actuales con destino más allá de nuestra estación, en dirección Chinchilla o Lorca.

Sin embargo quieren utilizarla torticeramente para otro objetivo -la llegada del AVE como sea- que retrasará el soterramiento y provocará una demora y aplazamiento que pudiera ser el comienzo de una nueva pifia, similar al Parque Paramount, Contempolis o Novo Carthago, además de un despilfarro de los dineros públicos sólo concebible cuando quienes lo proyectan no lo hacen con su propio peculio.

Esto es lo que quita el sueño a los vecinos del sur de la ciudad que se sienten engañados una vez más, pues la llegada del AVE a la Región no tiene por qué realizarse dañando a una parte de la ciudad, que quedará excluida de ella con un muro infranqueable que puede y debe evitarse.

De igual forma que ocurre en Valencia, con una estación previa -estación Joaquín Sorolla- que evitó la partición de la ciudad en espera del soterramiento de las vías hasta la Estación Central.

Con la ventaja de que Murcia dispone de una estación ya construida, tan sólo a 7 minutos de distancia en tren, que podría ser la estación provisional previa sin coste alguno o con un leve coste de pequeñas adaptaciones técnicas.

La necesidad de una estación previa viene avalada desde distintos ámbitos técnicos, como el Colegio Oficial de Ingenieros de Caminos, Canales y Puertos de Murcia, que en fecha 30 de mayo de 2013, tras reunir a su comisión consultiva de Transportes, llegó a manifestar por escrito a la Delegación de Gobierno: «Técnicamente, el soterramiento de las vías a su paso por la estación del Carmen - cuando se decidiese realizarlo- requeriría la construcción de una estación provisional para poder acometer las obras sin interrupción de servicio».

Nuestra tesis de estación provisional del AVE en Beniel ha sido reforzada por reiteradas visitas de la anterior ministra Pastor a dicha estación, y sólo recientemente se han manifestado opiniones abiertamente contrarias a la misma.

En reunión mantenida en la Sociedad Murcia Alta Velocidad el pasado 26 de julio, con un responsable de ADIF, reiteramos la opción de Beniel y volveremos a hacerlo en un nuevo contacto previsto para septiembre.

Esta Plataforma y los vecinos que la apoyan han venido actuando en todo momento con los recursos legales que en teoría ofrece un estado de derecho, en defensa de los intereses generales de la ciudad y la región de Murcia. Siempre, evitando la violencia y tratando de no llegar a situaciones límite como en otros lugares.

Hemos manifestado que no queremos en Murcia otro Gamonal, pero la dinámica seguida por los tres gobiernos es una clara agresión a nuestros barrios que corren un serio peligro de separación de la ciudad de la que forman parte, que ya son hoy la parte más degradada de la ciudad y que se les aboca a una perspectiva de verdaderos guetos separados por un muro excluyente y vergonzante.

Los vecinos del entorno de las obras se saben ninguneados por sus gobernantes, que no sólo les obligan a soportar las molestias y trastornos de unas obras que han de durar más de un quinquenio, y que responsablemente asumen, sino que se les castiga con un plus de sufrimiento innecesario para hacer llegar como sea, y antes del soterramiento de las vías, un tren de lujo que puede esperar a que se den las condiciones mínimas que lo hagan asumible para una población que no va a ser usuario habitual.

La vía en superficie que se está construyendo debe ser lo menos lesiva posible para los vecinos del entorno, únicamente para los trenes actuales y con la permeabilidad mínima actual que le confieren unos pasos con barreras que deben mantenerse ineludiblemente, pues no se trata de una nueva vía sino de la misma actual que se desplaza lateralmente unos metros para las obras del soterramiento. Lo que no será posible si por ella se introduce injustificadamente un ave con catenarias a 25.000 voltios.

Ante esta perspectiva, con unas obras que avanzan aprovechando el periodo vacacional, podría estar gestándose un conflicto social, del que esta Plataforma ciudadana no se hace responsable en absoluto, pese al apoyo que presta a estos vecinos que luchan contra su marginación y que durante décadas vienen dando muestras de una tolerancia casi estoica e imperturbable, soportando el paso a nivel urbano más grave de toda España, el de Santiago el Mayor. Responsables serán quienes lo están provocando.

No es justo este castigo encarnizado con nuestros barrios por un mero capricho elitista de hacer llegar el AVE sin soterramiento. ¡Con Beniel es posible! ¡Muros no!