Entre ´no matar al mensajero´ y ´no hables mal de tu caballo, si pretendes venderlo´ hay un intelectual recorrido. Con el problema del Mar Menor deberíamos llevar sumo cuidado. Menos publicidad y más ponerse manos a la obra. Entiendo que es esto lo que el Gobierno pretende. Por en medio, el PSOE (ya voceó lo suyo en Bruselas) resuelve poner una enmienda a los Presupuestos regionales, sin actuación concreta y valorada en un euro (!). Mientras, el arrojo ´verde que te quiero verde´ de los entusiastas de Podemos cambian el mote de una partida ya presupuestada y la convierten en enmienda. Veremos si, al final, Podemos logra lo que parece una pretensión: convertirse en la oficina técnica del Mar Menor y dejar con un palmo de narices a quienes también tienen su corazoncito y conocimiento científico.