Hoy, esta tarde, en el Comité Regional socialista, inexcusablemente Tovar debe dimitir como secretario general del PSOE murciano y dar paso a otros que intenten recomponer lo que él solito se ha cargado.

Resulta paradójico que ahora, urgentemente y después de haberse hundido con su Pedro Sánchez, Tovar haya convocado al Comité Regional, el máximo órgano, con un orden del día que resulta hasta ofensivo: Gestión de la Comisión Ejecutiva Regional y del Grupo Parlamentario en este último año. ¿Qué busca? Pues está claro, que alguien lo apuntale porque se desmorona.

Y digo que resulta ofensivo, porque Tovar lleva sin convocar un Comité Regional desde las elecciones de diciembre de 2015, para no tener que valorar los resultados electorales y el número de votos obtenidos en las dos elecciones generales que se han celebrado, que, por cierto, le han sido adversas. Los votos se le han caído como hojas de otoño.

Pero la realidad es que ya no puede seguir huyendo de la quema, lo que junto a su erróneo apoyo a Pedro Sánchez, le está obligando a dar la cara para tratar de sostenerse en el sillón, al tiempo que trata de evitar que le crezcan los enanos? como si eso ya fuese posible. Tovar ya tiene demostrada su incompetencia, tan sólo le queda demostrar su generosidad dimitiendo, porque su tozudez para enlaparse al sillón también está garantizada.

Durante el tiempo en que Tovar fue delegado del Gobierno de Zapatero, nos transmitió la sensación de que sólo pensaba en destacar él y salir en todas las fotos mas que en ayudar a los pocos Ayuntamientos socialistas de aquella época, a algunos no les dio ni agua. Le prestó más atención a las invitaciones de sus alcaldes para inauguraciones, eso sí con peana y micrófono, aunque allí no pintase nada, que a las verdaderas necesidades y demandas de sus Ayuntamientos. Demagogia pura de quien actúa como trepa.

Durante ese tiempo, en vez de hacer una oposición seria al Gobierno de Valcárcel, mas parecía que estaba haciendo una campaña personal para ser secretario general de su partido y luego candidato a la presidencia, pensando mas en él que en el PSOE, por lo que se vio.

Para conseguir ser secretario general prometió cargos que luego, al parecer, casi no cumplió o se le olvidó, como el dicho de prometer hasta meter y después de metido me olvido de lo prometido. Tovar en toda su esencia.

Durante las primarias para candidato se amparó en el poder fáctico de Madrid con su hija al frente, donde tenían controlados los censos, estando su hija en el mejor de los sitios, donde supuestamente se tocaba el botón para admitir o denegar afiliados, lo que incita a dudar de la transparencia en las votaciones que ganó.

En esos días se engordaron los censos en nuestra región con afiliados dudosos, de los que no han ido en su vida por el partido, ni todos pagaron la cuota para tener derecho al voto. A ver, ¿cuántos de aquellos están hoy en el partido pagando su cuota? Me da el tufillo que pocos o ninguno. Limpia, lo que se dice limpia, no parece que estuviese la victoria de Tovar, por lo que algunos la llaman 'la tovarada'.

Tras ganar la secretaría general y ser candidato, en vez de integrar al sector oponente, llámese crítico, va y aplica la política feudalista o semifascista de que el mejor contrario es el que está muerto, así que defenestra políticamente a todos los que se le enfrentaron, sin pensar que a quien realmente estaba amortajando era al propio PSOE como partido, tal cual ha sucedido, cargándose la posibilidad de mantener unido al socialismo murciano.

Tal llega a ser su rabia política, odio o animadversión por algún que otro opositor destacado que, en una ocasión, dicen, lo invitaron al Festival del Cante de las Minas de La Unión y no quiso ir el día que actuaba Pirineos porque físicamente le recordaba a uno de los que se le enfrentaron en el partido, y eso era superior a sus fuerzas. Verdad o no, es Tovar en toda su salsa.

Cuando llegaron las elecciones generales fue él mismo quien puso los candidatos sin contar con el parecer de las agrupaciones, o al menos, si contó con alguna, fue con las que sabía que le darían la razón sin rechistar, actuando mas como amo y señor que como secretario general de un partido democrático por excelencia. Estos diputados son a la vez miembros de su Ejecutiva, la permanente, y hace tiempo que dejaron de atender al partido y sus gentes, que son esencialmente los alcaldes y concejales, al menos como se necesita. Vamos, que habría que preguntarles a estos pajaritos cuando fue la última vez que pisaron la sede del partido para trabajar de verdad y conectar con el personal. Eso sí, a alguno pueden verlo por la tele, porque a otros? ni eso.

Tovar tiene molestos y enfadados a muchos de sus alcaldes porque no les ayuda a solucionar sus problemas, pero sin embargo éstos, para que no se enfade él, han de llamarlo para hacerse de notar en eventos, con fotos y micrófono incluido, que eso de ser el protagonista le va de orgasmo.

Prueba de esto es que por su negligencia política en la negociación de los presupuestos de la Región ha estado a punto de que los municipios pierdan muchos millones de euros para obras. Tuvieron que hacer una modificación antes del verano para salvar los muebles.

Pero la más gorda que ha hecho este político caduco es que queriendo cargarse al PP y esperando ser coronado presidente cedió alegremente a modificar la Ley Electoral para convertir la Región en una única circunscripción, lo que si bien es cierto que perjudica al PP, aún perjudica mucho más al PSOE en beneficio de Podemos. Tovar el estratega.

Aunque hay muchas cosas más, para muestra ya vale este botón, por lo que este secretario seneral que dirige el PSOE no debería durar mas allá de las siete de esta tarde en la reunión del Comité Regional, si es que se quiere evitar el brutal naufragio que ya se ve venir en beneficio de Podemos.

A ver, dicho bien claro, si no se va Tovar ¡que lo echen! no hay otra opción.

Dejarlo más tiempo en el cargo y que dimita tras otra derrota electoral o después de hundir y romper aún mas el partido, es una irresponsabilidad de todos los dirigentes socialistas que no debieran permitirse.

Así que, sí o sí, Tovar esta noche pa' su casa? ¡Chsss! y no solo.