Hay gente que miente como si nada, y otra que hace algún gesto que la delata. Hay gente que evita los ojos de las personas que le gustan y hay quien en ese caso taladra con la mirada. Hay gente que le echa agua a la pasta después de cocerla y hay gente que no. Hay gente que cuando se pone nerviosa es más inquieta y hay gente que se queda paralizada. Hay gente a la que le encanta la emoción de montarse en una montaña rusa y hay gente que no lo soporta. Hay gente que deja de comer para mantener la línea, otra que aunque quiera mantenerla come lo que le apetece, y hay quienes aunque coman lo que quieran la mantienen. Hay gente que llora con las películas y gente que no. Hay gente a la que le gusta llegar a los sitios y saludar y gente que prefiere evitarlo y pasar desapercibida. Hay gente que cree en los sucesos paranormales y gente que se ríe de ellos. Hay gente que baila en las discotecas, gente que aunque no le gusta se deja llevar y gente a la que es imposible convencer y se limita a observar. Y así un larguísimo etcétera, como que hay gente a la que le gustará leer esto y gente a la que no. Pequeños detalles. Todos tan diferentes. Todos tan iguales.
