Cada año me pasa. Llega el 21 de junio y en mi cabeza empiezan a sonar los acordes de aquella canción de Los Hurones en la que nos decían: «El verano, ya llegó; los mosquitos y el calor»... Buena época esta. Playas, chiringuitos, baños, bermudas, camisas de palmeras, bebidas refrescantes al gusto... Me gusta el verano. Soy de zona costera, cartagenero para más señas, y sin el verano me encuentro vacío. Lo siento. Pasear por las arenas de La Manga, Isla Plana, Calblanque... no tiene precio. Y ahora es el momento. Les invito, sean de donde sean, a que abran su mente y descubran, si no lo han hecho aún, este maravilloso rincón de la Región. Esta esquina donde todo tiene cabida en verano. Festivales de música, turismo de sol y playa, brisa marina, terrazas en zonas peatonales, gastronomía para deleitar cualquier paladar, yacimientos arqueológicos sin igual... Muchos dirán que existen otras ciudades en el entorno que tienen su encanto, pero permítanme: como Cartagena, ninguna.