Hay que ver como nos dejan de pasmaos nuestros políticos con sus declaraciones. Algunos se creen que en alguna de las comisiones de investigación que ha puesto en marcha la Asamblea Regional están descubriendo un enorme filón contra el PP.

Según se lee por ahí, el socialista portavoz Joaquín López va y suelta que van a llegar hasta el final para que nunca vuelva a haber un Auditorio como el de Puerto Lumbreras donde se ha despilfarrado el dinero. Con el conocimiento que tiene este político de lo que pasa o ha pasado en nuestra Región, parece mentira la fogosidad que le pone al de Puerto Lumbreras por tres duros y lo pasivo e ignorante que se queda frente a lo que pasó con el Auditorio de Cartagena, en donde sí que hubo un enorme despilfarro digno de Luis XV, el rey Sol, por decir algo suave.

Después de leer sus declaraciones, se podría asegurar que, de no estar el presidente de la Comunidad detrás del asunto, la cuestión del Auditorio de Puerto Lumbreras, terminado o sin terminar, le hubiese importado una comperdón.

¿Cómo puede tener tanto interés en aclarar las cuentas de un Auditorio que ha costado cuatro perras si lo comparas con el de Cartagena, que se presupuestó en 22 millones de euros y ha terminado costando más de 66 millones o, lo que es lo mismo, unos 11.000 millones de las antiguas pesetas, y aún no le hemos escuchado pedir una comisión regional de investigación del Auditorio de Cartagena? Que ahí si que se han dilapidado muchos cuartos y no hay forma de saber por donde, porque, si miras el edificio, sólo ves cemento, plásticos y unas escaleras indecentes y ofensivas para las señoras con faldas. Lo de Puerto Lumbreras, comparao, ná, tres chavos.

Un socialista de los más importantes me tiraba la puya de que en mi artículo del pasado domingo no mencioné al PSOE „¿quizás por olvido?„ cuando dije que en el ayuntamiento de Cartagena se había creado, gracias a Podemos y MC, una comisión para investigar el sobrecoste y contrato de adjudicación del Auditorio de Cartagena.

Pues no, no fue un olvido, mi buen amigo, no lo nombré porque cuando se adjudicó la obra, se terminó su construcción y se supo el enorme desvío presupuestario que arruinaba a la ciudad portuaria, fue en esos momentos donde no se supo nada del PSOE, ni de sus portavoces, y si algo dijeron, que lo dudo, fue tan leve susurro que casi nadie lo escuchó. Por ese tiempo, el pilarismo pepero y el socialismo cartagenero vivían unos momentos idílicos, muy dulces, razón por la que obvié mencionar al Partido Socialista. ¿Entiendes ahora mi lapsus, mi buen amigo?

A lo que íbamos, saben los socialistas perfectamente que Pedro Antonio Sánchez tiene el camino presidencial limitado por el caso Auditorio, al igual que saben que el presidente va a convocar elecciones anticipadas si el caso sube al TSJ y le meten una moción de censura.

Es en este punto donde los caminos nacionales y regionales se juntarían por la similitud del terreno de juego. Si bien por los madriles Ciudadanos, PSOE y Podemos tendrían que juntarse para desbancar al PP, pero entre ellos existe una manifiesta incompatibilidad; por aquí Ciudadanos y Podemos no son incompatibles, sino todo lo contrario.

A Rajoy, su estrategia de dejar paso a Pedro Sánchez, el guapo, para que se chumasquee en su intento de llegar a la Moncloa le va a salir mal, porque, como ya he dicho muchas veces, los de la izquierda terminan entendiéndose. Y más le vale a Pedro que sea así, porque unas nuevas elecciones podrían provocar que en vez de Pedro Sánchez la candidata sea Susana Díaz. En todo caso, Rajoy saldrá de la Moncloa.

Pues lo mismo le puede pasar a Valcárcel con su estrategia de haber dejado a un heredero de previsible corto recorrido, si como parece Pedro Antonio pierde la presidencia por el caso Auditorio y lidera el PP regional con la mochila del descrédito, hundiendo a los populares en beneficio de Ciudadanos, PSOE y Podemos. Partidos cuyos líderes, mi Miguelín y Oscar, lo están haciendo francamente bien, y Tovar, aunque mejora, no termina de cuajar del to´ por su carácter.

Otro panorama es que por los madriles mi Pablico se suelte la coleta, harto de que Pedro se los esté poniendo con Albert Rivera, y tire por la calle de enmedio provocando nuevas elecciones, lo que implicaría que en nuestra región saliesen las urnas sin más demora.

Con este panorama, los líderes políticos regionales no debieran seguir destrozando sus partidos y separando a sus militantes, que ninguno anda sobrao de votos. El PP de Pedro Antonio debiera olvidarse ya de Valcárcel, una rémora que resta votos, y hacer las paces con Garre, que los suma. El PSOE de Tovar debiera evacuar los orgullos y arrogancias viscerales y firmar la pipa de la paz con Roberto García y los suyos, testimoniando una unidad regional socialista que hoy está mas rota que nunca. Ciudadanos de mi Miguelín debe dejar de ver los toros desde la barrera y mojarse participando en el Gobierno que apoye, que es donde de verdad se consiguen las cosas, en la arena del coso, toreando.

Podemos de Oscar, que siga como va, porque se podrá estar de acuerdo con él o no, pero no engaña, es fiel a lo que predica y si no gusta pues que no le voten, son como son, lo que se ve. Y todos juntos, ¡que piensen en la región y en todos los murcianos!, que hasta el momento, y que se vea, todos torean mirando hacia arriba esperando el beneplácito de sus líderes nacionales, que les hagan ganar méritos a ellos aunque sea en contra de la región... y así nos ha yendo a los murcianos.

¡Ah!, y si Garre se decide por un partido regionalista, que lo haga ya o renuncie a hacerlo para que el paso lo den otros, porque hacer falta, hace mucha falta, que de los beneficios de no depender de nadie, demostrados están en Cartagena.

Lo dicho, pasmaos nos tienen nuestros asalariados portavoces y viceportavoces de la Asamblea con las frases que nos largan, como la de Víctor Martínez, del PP, que dice que hay Pedro Antonio para muchos años, y el socialista Joaquín López con las de su cruzada del Auditorio de Puerto Lumbreras... ¿Y cobran por decir estas cosas? Así nos va.