Una directriz de la Fifa para las competiciones femeninas de que se realicen comprobaciones previas de sexo, ha levantado ampollas. Aducen las chicas que es denigrante, y llevan razón. Tener que enseñar los comperdones no es de recibo, por mucho que les cuelen trampas con las testosteronas en los análisis. Y en esas mismas están. Que no saben cómo hacer ese exámen sin herir más susceptibilidades que las justas y en su justo término lugar... Yo propongo que se contraten unas buenas matronas gitanas y realicen la prueba del pañuelo, discretamente y sin más jaleos, ni palmas ni olés, por supuesto. Es una manera, una forma y fórmula, tomada de los clásicos, claro...