La última entrega de 'Palo y astilla' estuvo protagonizada por Alberto Chicote, que hizo un repaso junto a Mamen Mendizábal de su infancia, su familia, su presente y su futuro. El programa de laSexta permitió conocer el lado más íntimo del televisivo chef, así como a su mujer, Inma, que ejerce de jefa de sala en Yakitoro, su taberna.

La pareja del cocinero habló sobre cómo es su relación compartiendo lugar de trabajo: "Llevo trabajando con él desde hace mucho tiempo y nunca hemos tenido problemas, tal vez porque somos muy parecidos en la forma de pensar en el trabajo", explicó.

La presentadora del programa quiso saber cómo ha sido el cambio en la vida del cocinero: "Le ha cambiado porque tiene mucho menos tiempo, hacemos muchas menos cosas de las que hacíamos antes. Hoy empezaba un nuevo programa, por ejemplo, y anoche no durmió. Esas cosas influyen en el estado de ánimo, en el cansancio...", aseguró Inma.

"También cambias tus costumbres porque antes no le conocía nadie, entraba, salía, hacía muchas cosas y ahora no hace cosas que antes hacía como ir al camping y a la piscina", comentó entre risas. Por su parte, Chicote también reflexionó sobre el hecho de trabajar junto a su mujer: "Creo que es más complicado que las relaciones se vengan abajo precisamente cuando no ves a la persona con la que quieres compartir el resto de tus días".

El programa también habló con Angelina y José María, los padres de Chicote, que le definieron así: "Es maravilloso, muy cariñoso y sensible". "La gente cree que esa mala uva que aparenta en la tele es Alberto, pero no", expresaron los padres del cocinero.