No sé si este mes de agosto se celebrarán en Fortuna sus famosas fiestas en honor a San Roque, pero si por desgracia vuelven a suspenderse, apúntese al año que viene, se sorprenderá. Y es que tienen en el Desfile Sodales Íbero-Romano su máximo punto de esplendor. Quizás aquí encontremos uno de los puntos fuertes de esta ciudad, sus gentes.

Antes de dirigirnos a recorrer un municipio que está lleno de sorpresas, es obligatorio echar un vistazo tanto a su Iglesia de la Purísima Concepción (siglo XVIII), que ha tenido varias rehabilitaciones, y que se erige en el centro de la ciudad como epicentro de toda su actividad comercial, social, administrativa y financiera; o su Casa Convento (siglo XIX), dos edificaciones que sin duda bien merecen la pena, sobre todo el patio interior donde las Hermanas del Cristo Crucificado te recibirán con los brazos abiertos, y es que entrar en este lugar, mientras escuchas a los más de setenta niños y niñas de Educación Infantil impartir sus clases mientras disfrutas de la belleza de este edificio, es un auténtico placer. Y, a cien metros, su Casa Consistorial, donde encontrarás los poco conocidos Panneaux, lienzos pintados al óleo, únicos en la Región, adheridos a los muros y con frescos y estucos policromados en el techo, obra de J. Medina, datados en la primera década del siglo XX.

Iglesia de la Purísima Concepción

Esta semana, viajamos a la ciudad que alberga uno de los balnearios más populares y conocidos, no solo de Murcia, sino de España. En condiciones normales, durante todo el año, Fortuna y sus Baños albergan a visitantes llegados de Francia, Alemania, Holanda, Inglaterra, etc., atraídos, sin duda, por la magia que desprende este lugar.

Tras la DANA de septiembre de 2019, los Baños sufrieron un injusto castigo, y cuando apenas había pasado un año para empezar de nuevo a levantar la esperanza, llegó la pandemia que tanto daño ha hecho; esperemos que no vuelva a la sociedad ninguna circunstancia que tenga a este emblemático lugar apartado de la primera línea.

Balneario de Fortuna

Bañarse en un oasis

Ahora, de nuevo, comienza a recibir sus históricos clientes, llenos de ganas de volver a disfrutar de unos Baños únicos, pasear por sus pequeños jardines o tomar un café en medio de la paz que solo un lugar así es capaz de ofrecer.

Bañarte en el oasis en el que se ha convertido este espacio natural, en medio del paisaje desértico que rodea este rincón murciano, es un lujo al alcance de muy pocos. Si los romanos, que de vivir bien entendían un poco, sobre todo sus clases altas, encontraron aquí su particular paraíso, por algo sería.

Pero Fortuna comienza a encontrar también otros escenarios donde destacar, y en la recuperación de su patrimonio histórico está basando su futuro.

El Santuario íbero – romano de la Cueva Negra tiene un ‘árbol’ de cemento como guardián

Su Santuario íbero – romano de la Cueva Negra, a tan solo tres kilómetros de la ciudad, enclavado en la Sierra del Baño, es un lugar donde podemos disfrutar de sus denominados ‘tituli picti’ (textos latinos escritos con pintura roja – siglo II d.C.), y que junto a otras encontradas en Turquía, son prácticamente únicas en lo que era el imperio romano. Este es un lugar mágico, y es que pocas cuevas tienen un ‘tronco de árbol’, hecho de cemento, como guardián. Si a ello le sumas la recuperación que se está llevando a cabo en el Balneario Romano de Fortuna, a escasos doscientos metros de la actual ubicación que tiene el complejo Baños de Fortuna, ambos lugares están llamados a convertirse en uno de los principales atractivos turísticos, no solo del municipio, sino del interior de la Región de Murcia.

Fortuna

Piedra a piedra, el antiguo Balneario Romano comienza a erigirse como un símbolo de la comarca, sin duda, la mejor inversión que ahora mismo se puede hacer es apostar por poner en valor esta pequeña joya llena de memoria y de historias.

Sierra de la Pila: Senderismo por los 4 costados

Aún guardo en mi memoria la primera vez que desde la pedanía de La Garapacha bajé un febrero por sus campos llenos de almendros en flor. Tras dejar atrás su Cortado de Las Peñas, recuerdo entrar en un mundo mágico, lleno de blancos y rosas, de huertas y árboles frutales. Sin duda, hacer la ruta a pie circular que recorre este lugar es algo más que recomendable.

Al igual que adentrarte en su Sierra de la Pila, visible prácticamente desde cualquier punto de la Región, y que enseguida se reconoce por su especial silueta, que te ofrece diferentes alternativas para practicar senderismo por un paisaje muy personal.

La Sierra de la Pila se ha convertido también en uno de los principales puntos de encuentro de amantes de la bicicleta de montaña, aunque es cierto que si alguno quiere probar sus cuestas hay que estar bien preparado.

Casa Convento

El Ayuntamiento, a través de su oficina de turismo, ofrece visitas guiadas muy interesantes, tanto en la ciudad bajo la luna mientras te cuentan las historias de Jaime Alfonso El Barbudo o El Cerigüelo, como recorriendo su sorprendente patrimonio o sus rutas senderistas. Sin duda, Fortuna tiene aún mucho que descubrir.

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