Aquí tenéis la receta de una deliciosa tarta de queso cremosa para la que sólo necesitaréis cuatro ingredientes. Super fácil de hacer y espectacular resultado. Se acompaña de mermelada, miel o con lo que más os guste. Simplemente sola es una delicia imposible de olvidar. Que la disfrutéis.

Ingredientes

4 huevos grandes, 275 g. de azúcar común, 750 g. de queso cremoso y 50 g. de harina.

Elaboración

1. Separamos las claras de huevo de las yemas.

2. Montamos las claras a punto de nieve y reservamos.

3. En un recipiente aparte, mezclamos las yemas con el azúcar y las batimos hasta que estén esponjosas.

4. Agregamos el queso cremoso y batimos hasta obtener una mezcla sin grumitos.

5. Tamizamos sobre esta mezcla de queso la harina y con una lengua pastelera mezclamos hasta que se integre.

6. Por último, añadimos las claras a punto de nieve que teníamos reservadas y mezclamos con la lengua pastelera mediante movimientos envolventes, hasta obtener una mezcla homogénea.

7. Vertemos en un molde redondo desmontable forrado con papel vegetal (importante que el papel cubra los bordes del fondo del molde para que la masa no se salga en el horno antes de que empiece a cuajar).

8. Metemos al horno precalentado a 180 grados y horneamos a esta temperatura durante 1 hora (a veces 5 minutos más).

9. Dejamos que el pastel se enfríe dentro de su molde y luego lo desmoldamos y metemos al frío hasta el momento de su consumo. Decorado con mermelada, frutos rojos, sin nada o... Como que más nos guste.