La banda estadounidense de Sacramento !!! (Chk Chk Chk) vuelve de gira por España para presentar su último disco, Wallop. Además de un quebradero de cabeza para quienes los intentaban buscar en Google (Nic Offer y sus secuaces ya aconsejaron en su día pronunciarlo con una especie de chasquidos de lengua consecutivos: «Chk, chk, chk», !!! son uno de los principales referentes de la vertiente más bailable del revival post-punk. Louden up now (Touch & Go, 2004) les dio a conocer en todo el mundo, y con unos conciertos salvajes e inolvidables llevan veinte años asegurando que el boca a boca haga el resto. Ya pasaron por aquí presentando su anterior disco, Shake the shudder, surgido de varias sesiones de improvisación llevadas a cabo en Barcelona.

La banda se presentó en sociedad en 2001. Con su ya célebre debut epónimo, no tardó en meterse en el bolsillo a amantes del rock y la electrónica, gracias a una aplastante mezcla de punk, dance, hip-hop y house de la escuela Chicago. Unos ingredientes que dieron vida a trabajos como Myth takes y Thr!!!er, y que vuelven a destacar ahora en Wallop, su octavo LP, que cuenta con invitados variados como Angus Andrew, frontman de Liars; Maria Uzor, de Sink Ya Teeth, y el mago del synth-pop, Cameron Mesirow, de Glasser. Además, en la producción del álbum han participado artistas como Cole M.G.N., Graham Walsh y su colaborador habitual, Patrick Ford.

Con Nic Offer a las voces; Mario Andreoni a las guitarras; Dan Gorman y Allan Wilson a las trompetas, la percusión y los teclados; Tyler Pope con los dispositivos electrónicos, además de a las seis cuerdas; John Pugh a la batería, y Justin Vandervolgen con el bajo y efectos, Wallop se suma a un catálogo impresionante que !!! llevan construyendo desde hace más de dos décadas, llegando cada vez más lejos en su aproximación artesanal a la música de baile.

A casi veinte años de su debut, la banda conserva esa vitalidad cruda que ha conquistado a numerosos fans españoles. Sin parar: su groove es infinito. Una de las claves está en un cantante singular, Offer, al que nadie le tose encima de un escenario. Él responde a nuestras preguntas. Los de Sacramento siguen otorgando razones para que los signos de admiración estén justificados. !!! siempre han jugado en otra liga.

Los noventa, o quizá los ochenta, debieron ser vuestros años formativos. ¿Qué tal la revisión de los sonidos de aquella época con vuestro nuevo álbum?

Ojalá pudiera decir que los noventa fueron mis años formativos..., pero soy algo mayor; fueron los ochenta. En los noventa era demasiado punk para la mayoría de la música indie o de baile. Me interesaba más el disco funk de los setenta y el hip-hop y el R&B de los noventa, así que la música que escuchábamos mientras se gestaba este disco era más nueva que nostálgica. Ojalá no hubiera sido tan snob entonces. Por eso intento ser más abierto ahora a todo lo que ocurre musicalmente.

Entonces, ¿qué escuchabais mientras hacíais este álbum?

Mucho 2-step garage, Haruomi Hosono, rap contemporáneo, dembow [perreo] y música de club. Escuchamos más música contemporánea que antigua, sinceramente.

¿Os apetecía experimentar más con este disco, volver a un sonido más experimental, como el de vuestros inicios?

Creo que siempre hemos experimentado, y no diría que volvemos a hacerlo, solo que experimentamos más, damos saltos más grandes. Retroceder es de idiotas. Siempre adelante.

He leído que consideráis que en este disco hay una influencia importante de los noventa ('madchester' y electrónica), lo cual me parece bastante curioso.

Sí, a mí también. La verdad es que el 'madchester' no me gusta mucho. El primer álbum de los Stone Roses y algunos discos de Primal Scream son buenos, pero no los escucho desde que era un crío. Pero sí que escuchamos un montón de electrónica de los noventa.

Seguís en el prestigioso sello Warp. ¿Cómo has visto la evolución del negocio desde vuestros inicios?

Bueno, es que entonces no se trataba en absoluto de un negocio; si ganábamos 40 dólares después de un concierto, para nosotros estaba bien. Así que supongo que desde entonces ha cambiado mucho, pero aquello nos enseñó que la música es la parte más importante, y seguimos pensándolo.

Durante estos años habéis hecho muchas canciones que reflejan el clima político de estos tiempos, como Five companies o Pardon my freedom . ¿Lo tuvisteis en cuenta para hacer las canciones de este álbum?

Sí. Fue difícil en cierto modo. Una canción debería presentar una opinión única, y nosotros queríamos que las nuestras dijeran cosas distintas de las que todo el mundo dice on line, pero estoy contento con los resultados.

¿Por qué un título como Wallop ?

Mi gato Percy, que sale en la portada del álbum, trepó un día hasta donde estaba trabajando y me sorprendió con un golpetazo [ 'wallop']. Pensé que era una palabra extraña. El diccionario la define como: «Golpe claro y conciso que aturde». Es una buena descripción del disco.

Nic, el álbum se grabó en tu apartamento con algunos invitados. ¿Fue casualidad o a propósito? También habéis trabajado con tres productores, si no me equivoco. ¿Por qué?

Con algunos fue casualidad, porque todos trabajamos ahí, pero decidimos grabar a toda la banda ahí, y fue una decisión importante. Por otro lado, trabajamos con varios productores porque, al ser una banda numerosa, estamos acostumbrados a las fricciones que genera el haber muchas ideas implicadas. Nos gusta así.

¿Cómo se maneja con las redes sociales una banda nacida en los noventa?

Creo que es una forma estupenda de interacción entre las bandas y los fans, y para que mucha gente pueda darse a conocer a nivel artístico. Me gustaría que se nos diera mejor, pero prefiero pasar el tiempo trabajando en la música.

¿Cómo describirías el nuevo álbum?

Como otra obra de arte.

¿Qué lo inspiró? ¿Es un álbum político?

Lo inspiró la vida y el hecho de vivirla. No es necesariamente un disco político, pero estos tiempos son políticos, así que es uno de los discos más políticos que hemos hecho.

¿Cómo va la gira europea? ¿Qué ciudad es la mejor para el baile y la fiesta?

Es difícil decirlo; muchas ciudades han estado bien, pero todavía no hemos llegado a España, y normalmente ahí es donde nuestros conciertos son mejores.